Los Nets mandan un aviso a la NBA: repaso a los Lakers
El equipo de Brooklyn ganó con mucha claridad en casa de los Lakers el día en el que LeBron James superó la barrera de los 35.000 puntos.
El partido de la jornada en la NBA en la noche en la que se anunciaron los titulares del All-Star 2021 no dejó indiferente a nadie. Se podría decir que a lo mejor algo frío, pero igual no es preciso afirmarlo: ahora, tras ver el resultado, el aficionado puede sentir más calor que antes dentro de sí por ver un nuevo capítulo. Lakers y Nets batallaron en el Staples Center con un resultado arreglado al final, 98-109, que no hace tanta justicia a la diferencia que en realidad hubo.
LeBron James por un lado y Kevin Durant por otro, capitanes para el Partido de las Estrellas. El primero estaba en cancha; el segundo ausente. Y, con ello, repaso importante el que se llevaron los angelinos. Cierto es también que contaban con otras dos bajas importantes. Dennis Schröder fue declarado como no apto a falta de una hora para el encuentro y Anthony Davis seguirá de baja cuatro semanas más. De poco le sirvió a los Lakers que LeBron metiera 32 puntos, siendo el máximo anotador, y sobrepasara la barrera de los 35.000. Sólo el ejercicio de maquillaje que hubo en los últimos cuatro minutos impidió que cuadraran su anotación más baja del año (92), a la que se acercaron peligrosamente.
Control total de los Nets en una jornada que sirve de aviso para toda la NBA. Caen los campeones, lo hacen en casa y surge un rival que cada vez da más miedo. Con Harden, Irving y también implicando a más jugadores, como en este caso fue el francés Timothé Luwawu-Cabarrot. Un dato habla claro sobre cómo se crece la Brooklyn de Steve Nash ante los grandes: 10-1 ante equipos de más de un 50% de balance y 9-11 ante equipos de menos de un 50% de balance.
El encuentro empezó con ganas por parte del bando local. Dos triples de Kuzma y un 2+1 de LeBron les ponían por delante. Era cuestión de que su rival cogiera velocidad de crucero, nada más. Jeff Green se quedó como pívot titular emparejado con Marc Gasol y no fue hasta que salió DeAndre Jordan, algo que no está siendo una constante esta temporada pero sí en este encuentro, cuando se cerró un agujero grande que los locales estaban aprovechando para hacer daño a los Nets. Eso y que James Harden empezara a ir como un puñal hacia el aro. Al final del primer cuarto ya estaban por delante.
El barbudo nuevo base a las órdenes de Nash iba contra todos en las penetraciones y servía bien a sus compañeros si lo veía muy turbio. Johnson, Shamet y TLC calentaban la muñeca y los Nets se distanciaban. Más triples, en este caso una serie de tres de Harris y Green, ponían ya casi a 20 a su rival antes del descanso. Se esperaba una reacción después del paso por los vestuarios y así fue, con un 10-2 de parcial coronado por dos canastones de LeBron echándose hacia atrás.
El partido quedó anestesiado sin solución de continuidad en la respuesta a ese gran parcial de los Lakers. Ese Harden base, como admitió Irving la semana pasada que sería todo el año, mareó a los de Vogel, que no reaccionaron ni defendiéndole ni obligándole a él a hacerlo. Caruso, Caldwell-Pope, Matthews y Horton-Tucker, mejorables ante él y el mencionado Kyrie. En el inicio del último periodo se vio ya la desgana del vigente campeón, que vio a Harden y su 23+11 final demasiado fuerte y a unos Nets que anotaron 18 triples en 39 intentos. Y sacaron la bandera blanca a mitad de esa manga final.