Los Rockets ganan fuera de casa en su primer partido sin Harden
El equipo, aún sin Kurucs, Exum y Oladipo y ya con James Harden fuera, sorprendió a los Spurs en el derbi texano. Paso adelante de Sterling Brown.
El golpe anímico de la salida de James Harden, así como el no poder contar todavía con sus recambios, ha afectado casi positivamente a los Rockets. Así ha sido si nos atenemos al primer partido disputado después del megatraspaso. No estaban Rodions Kurucs, procedente de los Nets, Danté Exum, procedente de los Cavaliers, y Victor Oladipo, procedente de los Pacers, pero los de Silas se hicieron con una victoria de mérito en el AT&T Center de San Antonio.
Los Spurs cayeron en su casa en este derbi regional de Texas pese al paso adelante dado por Keldon Johnson, el más anotador de la noche (29 puntos). Y es que en los Rockets también hubo alguien que dijo estar allí para triunfar, un Sterling Brown que se fue hasta 23 tantos, amén de que la referencia de su equipo fuera el pívot Christian Wood (27+15). No es baladí: a las bajas ya nombradas de los visitantes se añadían otros dos bases importantes, John Wall y Eric Gordon.
Brown cogió el puesto de titular de Harden e hizo un bello tratamiento de él. También hubo minutos para Mason Jones y Kenyon Martin. El primer arreón de los visitantes fue neutralizado parcialmente por Aldridge, Walker y Johnson, aunque sólo el último aguantó el tirón todo el partido. La salida de Pöltl ayudó en los dos lados y la distancia se redujo al mínimo. El juego de los Rockets, alejado de lo que hemos visto todos estos años, era práctico: poste bajo y dentro-fuera, cortes por línea de fondo y menos abuso del triple. Baloncesto sencillo frente a unos Spurs que han sido toda una garantía de ello a lo largo de este siglo, precisamente.
Los Spurs comenzaron mejor la segunda parte, contando un once a cero con el descanso entre medias, y lideraron el tercer acto con un Johnson ya convertido en la referencia. No sería así en los minutos finales. Los de Popovich, con nueve puntos de ventaja a falta de cuatro, jugaron para Aldridge y DeRozan, que son sus estrellas, y fallaron en el intento. En dos minutos ya estaban empatados ambos conjuntos. Dos triples de Wood y uno de Brown apagaron las luces del rival e impulsaron tres acciones posteriores dentro del perímetro que les dejaron a las puertas del ganar. DeRozan redujo con una canasta pero no conectó la siguiente y P.J. Tucker, con dos tiros libres, fue el que selló la victoria de unos Rockets envalentonados que soltaron todos los malos pensamientos para abrir ya una nueva etapa.