El Gran Canaria se gusta y encarrila el primer puesto

Continúa siendo la Eurocup el bálsamo perfecto para la dolorosa trayectoria doméstica del Herbalife Gran Canaria, por supuesto impropia para una entidad de su alcurnia y presupuesto. Esta noche, con el regreso de Beirán incluido y grandes números de Dimsa, Okoye o Balcerowski ante el Bursaspor (89-76), los pupilos del discutido Porfirio Fisac se postularon para tenerlo todo a favor de cara a acabar como primeros de grupo. La incógnita se resolverá en Trento la semana que viene.

De nuevo, el Herbalife ofreció su cara buena en la Eurocup. Al menos la puso en juego, algo que este curso, en la ACB, brilla en exceso pero por su ausencia. Certero como nunca desde el triple, cuatro en la primera parte, Dimsa inauguró el marcador desde el 6.75, y un mate de Costello le dio al Gran Canaria un rápido parcial inicial de 5-0. Se agarró el equipo insular en estos compases iniciales al interior estadounidense, que con siete puntos casi consecutivos lideró la primera escapada local: 10-4.

No se descomponía el Bursaspor, corta su rotación de apenas ocho jugadores, y un triple de Turen le mantenía en vereda, 10-9. Amenazó el Herbalife con romper el partido tras un triple de Ferrari y un enceste de Shurna para el 20-13, 22-15 poco después tras la primera canasta de Slaughter, pero Newman le sacó un 2+1 a Okoye para estrechar el marcador al final del primer acto: 22-18.

Economizando fueras, rotando continuamente Alimpijevic a su cortísima rotación, cosas del COVID-19, la formación turca empezó el segundo cuarto de manera centelleante. Mutaf empató rápidamente a 22, y un mate de Jones para el 23-24 supuso la primera ventaja otomana en todo el partido: 23-24. Mutaf seguía a lo suyo, percutiendo sin cesar, y una canasta de Jones estiró el parcial a 1-13, 23-30 en el cielo del Gran Canaria Arena, 1-15 la diferencia sumando también los últimos compases del primer cuarto.

Recortó distancias el Herbalife, tras el obligado tiempo muerto de Fisac, gracias a dos triples de Okoye, 29-30, 32-33 poco después tras un lejano enceste de Dimsa, recuperando de nuevo el Granca la iniciativa en el marcador tras el cuarto triple del alero lituano, que supuso además el 42-39. Comenzaban a gustarse los baloncestistas locales, jugando en cualquier caso sus mejores minutos del partido, y acabó los 20 minutos iniciales en todo lo alto tras un furioso mate de Balcerowski, a pase del hiperactivo Dimsa, para dejar una estadística de 47-41 antes de afrontar la segunda parte.

Pese a que fue Newman quien primero movió el marcador tras el receso, parecía que el Herbalife Gran Canaria salió dispuesto a sentenciar el partido cuanto antes. De hechos, ni que estuviera arrinconado y a un palmo de la lona, al Bursaspor le venían golpes de todos los colores. Sendos triples de Slaughter y Dimsa le dieron un +10 a los locales, 53-43, y el 6º triple del exterior lituano mantenía la psicológica renta: 56-45. Enrachados los locales, otro triple de Okoy para el 63-49 y dos canastas seguidas del gigante polaco Balcerowski, buen juego de pies el suyo, le dio al Granca la máxima ventaja de su favor en el partido: 67-52.

Por entonces ya estaba en cancha Javier Beirán, apartado del equipo, sin mediar siquiera un expediente disciplinario, desde los albores de noviembre. De hecho, su último partido fue contra el Baskonia el pasado 1 de noviembre. "Entendemos de manera distinta lo que tiene que ser un capitán del Gran Canaria", dijo Fisac.

Pese a ver con el partido tan cuesta arriba, el Bursaspor no parecía rendirse. Así, cinco puntos consecutivos de Mutaf le restaron claridad momentánea a la victoria amarilla: 68-59. Se lo creyó el equipo turco, y más cuando Jones le sacó un 2+1 a Okoye para cerrar el tercer periodo con un apretado 68-62.

Consciente de lo que se jugaba, por supuesto muy presente la necesidad de encarrilar el primer puesto del grupo (le valdría con perder de menos de 10 puntos la semana que viene), supieron los muchachos de Fisac conservar a la perfección su ventaja, ayudados a demás por la lógica pérdida de gasolina rival. Okoye y Albicy conectaron dos triples para el 74-62, y entonces la rampa fue imposible para el Bursaspor. Cierto es que se puso a nueve tras un triple de Munford, 76-67, pero esto ni siquiera le permitió anhelar una remontada que ya era del todo imposible.

Con todo a favor acabó gustándose el Gran Canaria, en el que además anotó Beirán (81-72). Con el 89-76 final, los insulares aclaran mucho su panorama europeo, muy accesible el primer puesto del Grupo D.