James Harden tensa la cuerda
La gran estrella de los Rockets pasa de la primera toma de contacto con sus nuevos compañeros y el entrenador entrante.
Los Rockets han vuelto a la actividad después de despedirse de la anterior temporada frente a los Lakers, más tarde campeones, en la burbuja de Florida. Aquel resultado no satisfizo las necesidades de la franquicia, que se quedó sin el entrenador principal y decidió dejar a un lado su estricta configuración para reconstruir a medio plazo. Russell Westbrook ya no está en el equipo, ahora el que le sustituye es John Wall, el nuevo técnico es Stephen Silas, procedente de los Mavericks, y nadie sabe lo que va a pasar con James Harden. La de 'The Beard' es la gran incógnita, más sabiendo lo que ha ocurrido estos días.
En Houston se ha regresado a la acción de cara a la pretemporada. Se han establecido las cuarentenas después de los preceptivos exámenes médicos para prevenir el COVID-19 y han dado comienzo los entrenamientos en distintas fases. Pero la ausencia más destacada es la de Harden, el jugador-franquicia y MVP de la NBA hace sólo dos años. Para Harden se había preparado una práctica individual en el Toyota Center este pasado domingo por la tarde, pero no apareció. Y es que ni siquiera ha estado en la ciudad texana durante las últimas horas.
James Harden estuvo el fin de semana en Atlanta para celebrar el cumpleaños del rapero Lil Baby. En la fiesta se le pudo ver sin mascarilla, como se aprecia en las fotos que se han publicado. El rumor es que, además, ha pasado por Las Vegas. Se ha filtrado una imagen del jugador tirando billetes de dólar en un club de alterne, lo cual hace más grave una situación que ni siquiera se tendría que haber dado. Los nuevos protocolos de la NBA exigían que durante estos días, en la previa del comienzo de los entrenamientos para competir en la 2020/21, los jugadores estuvieran guardando una cuarentena en sus casas, sin exposición al virus.
La temperatura sube y la situación ya es tensa de por sí en esta franquicia. La salida de Westbrook ha dinamitado el terreno un poco más. Las miradas vuelven a apuntar como responsable a un James Harden que sigue con la idea de irse a los Nets a acompañar a Kevin Durant y Kyrie Irving en su gran asalto al campeonato de la NBA.
Según Tim MacMahon (ESPN), Harden no se ha comunicado en los últimos días con su nuevo entrenador pero sí con dirigentes de la franquicia, a los que ha trasladado que les dirá algo próximamente. Poca exactitud.
"Sólo quiero decir que le quiero aquí, que quiero que sea parte de los que vamos a hacer. Quiero entrenarle", dijo Silas, que añadió que "estamos intentando que venga y haga ese entrenamiento individual" y que "obviamente, cuando esté aquí, la mejor forma de comunicarme con él será cara a cara, ni mensajes ni móviles ni nada más". Los reporteros habituales de la información de los Rockets le pidieron su opinión sobre el grado de compromiso con ellos que ahora mismo tiene James Harden, respondiendo lo siguiente: "Ésa es una pregunta que le debéis hacer a él".
El contrato que ahora mismo soportan los Rockets con James Harden es uno de los más costosos de la NBA. El jugador cobrará 41,2 millones la próxima temporada, tiene una opción de jugador para renovar en 2022 por 47,3 y sería completamente libre en 2023, poseyendo además un trade kicker (bono de traspaso) del 15%.