Las Storm son un tormento: rodillo y título en la burbuja
Seattle Storm se hizo con un nuevo campeonato de la WNBA. Son dos en tres años para ellas. Breanna Stewart es la MVP; Sue Bird, la leyenda.
Las Storm son campeonas de la WNBA otra vez. Dos veces en tres años. Sólo las Mystics de una Elena Delle Donne en números históricos y que se ausentó de esta burbuja en medio de una tremenda polémica las ha derrocado en los últimos tiempos. Eso y que el año pasado no contaron con Breanna Stewart, su MVP, por una lesión gravísima producida en la Euroliga.
Al igual que la NBA, la WNBA planteó este verano una burbuja en Florida. En Bradenton, en la IMG Academy, es donde se ha celebrado la de las chicas. Y allí el resultado ha sido el mismo que fuera de ellas: unas Storm que siguen dominando la Liga a golpe de puntos y defensas que pueden asfixiar hasta a la más pintada. Es lo que les ha ocurrido a las Aces, que arrancaban el año con novedades pero que a la hora de la verdad no han contado con Kelsey Plum y Liz Cambage, dos de sus mejores jugadoras. Las de Las Vegas gozaban de las presencia de la MVP de la Temporada, la joven A'ja Wilson, pero su participación tampoco ha sido suficiente.
Las Aces y las Storm llegaban con idéntico balance clasificatorio (18-4) y con el mismo salvoconducto en los playoffs: reengancharse en las semifinales. Al llegar a la serie definitiva la historia no ha sido ni medio parecida: a cinco partidos se necesitaban tres victorias y las de Seattle se han impuesto por 3-0. El último día, resuelto por un cuasinsultante 92-59 (siendo ésta la mayor diferencia en un partido de las Finales que jamás se haya dado).
Dos protagonistas
Para Breanna Stewart no sólo es volver de la mejor forma posible sino hacerlo con otro premio de MVP bajo el brazo. Siendo la mejor sin discusión. En la fase regular promedió 19,7 puntos y en la postemporada subió la marca a 25,7. En las Finales ha anotado 85 puntos en tres citas. Con 26 años se sitúa mucho más cerca del trono de la reina de la WNBA.
Para Sue Bird es seguir ganando. Más cerca de la retirada que nunca, más cerca de ser más leyenda de lo que ya es. Desde 2004 ganando todos los grandes campeonatos del baloncesto en categoría femenina que se pueda uno imaginar. En su caso es el cuarto título de la WNBA.