Álex Mumbrú está destinado a ser seleccionador tarde o temprano. Lo sabe él y todo Miribilla. También Garbajosa, el presidente de la Federación, aunque ha renovado a Scariolo por cuatro años. Pero le gustaría ver al técnico del Bilbao Basket en esa silla, algo que ahora mismo a este le suena a chino, por todo lo que tiene encima de la mesa con su equipo: 0-3 en la ACB y la importante visita del Obradoiro mañana. "Agradezco un comentario así (de Garbajosa sobre que le gustaría verle de seleccionador algún día), pero lo que me preocupa es el Obradoiro, no pienso ni un segundo en ello, es importante estar bien, involucrarnos en el ritmo de la temporada y no distraernos. Me preocupa el partido de mañana, no pienso en nada más", zanjó sin querer extenderse el exalero, que tiene contrato en Miribilla hasta 2022. No parecen muy oportunas esa declaraciones de su amigo Garbajosa.

La cita ante los santiagueses reúne a dos equipos en trayectoria bien diferente: uno con 0-3 y otro con 3-0. El calendario ha influido casi decisivamente. Y el acoplamiento que están teniendo los nuevos en ambos equipos: Birutis está siendo una de las revelaciones de la temporada (el MVP de septiembre) y hay un puñado de fichajes en Miribilla aún a media cocción. "No tenemos obligación, para nada. Sí en el hecho de jugar bien a baloncesto, a ser mejor equipo", proclama el preparador barcelonés. "Tenemos que jugar contra todos, no es bueno pensar en el calendario, con tres jornadas tan seguidas te da poco margen para hacer cosas", refleja Mumbrú, quien destaca que se enfrentan a la segunda mejor anotación de la ACB. Y a un Oliver que es mayor que él. Estuvo en el debut del base temporero del Obra, con la Penya, y compartieron equipo tres años.

El Obradoiro tiene un juego interior poderoso y "dinamita en el perímetro". Pero no estará Serron por lesión, el mejor defensor por fuera. Sí podrá jugar Balvin, aunque arrastra molestias. "Estamos intentando buscar el mejor acople del equipo", dibuja el técnico en alusión a las combinaciones que va haciendo, con dos cuatros, dos bases o dos cincos en momento puntuales en busca de dar con las posiciones ideales de los nuevos. El hecho de estar tres meses inactivos muchos de los fichajes no ayuda. "Estamos tranquilos y trabajando bien. Tratamos de jugar cada vez mejor y ser mejor equipo, puliendo aspectos en defensa. Con un 30 por ciento en tiros de dos, como el otro día, es complicado competir", finaliza, al tiempo que reitera que le encantaría "que entrara público en la Liga". "Somos de las pocas que han seguido en la pandemia, con la burbuja de Valencia, y de las primeras que pueden meter público en las canchas".