Luka Doncic está cuajando unas series en su debut en playoffs para la historia, por mucho que su equipo cayera la pasada madrugada ante los Clippers. Solo ante el mundo, sin Porzingis y lesionado, el esloveno no pudo repetir la gesta del último encuentro, en el que acabó con triple-doble y el tiro ganador desde fuera de la línea de tres puntos. Una actuación excepcional que le valió los halagos del mundo de la NBA con tan solo 21 años de edad, algo asombroso tratándose de una estrella que, por mucho que sea emergente, se encuentra solo en su año sophomore.

También los aficionados de la mejor Liga del mundo vibraron con la actuación del jugador de los Mavericks, de la misma forma que hoy se han indignado por la fea acción que Marcus Morrus ha tenido con él en el quinto partido de la serie. El jugador de los Clippers ha pisado a Doncic en el tobillo en el que sufre molestias desde el pasado encuentro, causando un gran dolor en líder de los Mavs. Una acción que muchos han considerado intencionada, hablando incluso de guerra sucia contra un jugador al que han sido incapaces de parar en toda la serie.

En la imagen grabada desde arriba, la más repetida en Twitter, se ve el pisotón, pero no se aprecian bien las intenciones del jugador de los Clippers. Sin embargo, en la grabación realizada a pie de pista se puede ver como Morris corre hacia Doncic tras una canasta angelina, acercándose peligrosamente a él y adelantando su pierna izquierda sospechosamente para pisar la de Doncic, incluso corrigiendo la trayectoria en el aire para encontrar el tobillo.

Como no podía ser de otra manera, Morris ha negado vehementemente las acusaciones. "Pensar que trato de hacer daño a otros jugadores es una locura". Doncic no estaba del todo convencido tras el encuentro, que acabó con  puntos, 8 rebotes y 4 asistencias. "Tengo mis propios pensamientos", decía el esloveno. "Espero que no me haya pisado aposta", sentenciaba tras hacer evidentes gestos de dolor en el momento en el que la acción tuvo lugar. Un feo gesto que aviva la polémica y que deja las cosas calientes de cara al sexto encuentro de la eliminatoria. Un win or go home para unos Mavs que, todo hay que decirlo, están rindiendo de manera excelente. Con Doncic a la cabeza, claro.