La hora definitiva para Dos Anjos
Gran promesa de la cantera del Madrid, se estancó y ha tenido que aguardar para tener un contrato largo en ACB. El Bilbao le puede relanzar. Espera aprender con Balvin.
Felipe Dos Anjos crecía y crecía en todos los sentidos (el físico y el baloncestístico) en la cantera del Madrid y Laso se frotaba las manos ante el cinco del futuro. Se fue formando desde categoría cadete y ya como júnior ganó el Campeonato de Europa de clubes de 2015 en un equipo en el que coincidió con Luka Doncic. Pero su camino ha sido muy distinto al de la actual estrella de Dallas Mavericks. Se estancó porque no acabó de creérselo. Su estatura (2,18) es un caramelo en estos tiempos en los que escasean en Europa los cincos coordinados. Ha tenido que esperar para tener una oportunidad larga en la máxima categoría. Ha disputado tres temporadas en LEB Oro, con Oviedo, Melilla y Palencia, y sólo rozó la ACB con cuatro encuentros con el San Pablo Burgos en la campaña 2017-18.
En 2012 Dos Anjos llegó al Real Madrid procedente del Esporte Clube Pinheiros brasileño e inmediatamente se convirtió en uno de los jugadores más prometedores de la cantera merengue. El Adidas Next Generation en el que promedió 9,9 puntos, 7,3 rebotes y 1,3 tapones le pusieron en el punto de mira de muchos ojeadores NBA y en la temporada 2015-16 jugó en el equipo filial de Liga EBA, donde promedió 9,7 puntos, 7,4 rebotes y 1,4 tapones para 11,9 puntos de valoración. A sus 22 años, el pívot carioca iguala a Weis como techo en Bilbao, en donde ha firmado por dos temporadas. Tratará de aprender junto con Balvin (2,16) formando una pareja de torres. "Quiero aprender a jugar contra pívots de más de 2,15, como Tavares o Tomic. Balvin es un jugador que lee muy bien, tiene una buena visión de juego y es muy potente. Con mi juventud entrenar con alguien que es casi de mi altura es muy bueno para poder mejorar", explicó el interior sudamericano en la rueda de prensa que ofreció en Miribilla junto al director deportivo, Rafa Pueyo.
Confiesa que en los primeros contactos habló con Pueyo y Mumbrú y quedó encantado con lo que escuchó. Además, jugar ACB y Champions le fascina, aunque posiblemente tendrán que arrancar sin público. "Desde el primer día Mumbrú vino con energía brutal y nos está corrigiendo los pequeños detalles que hacen la diferencia en un partido. Voy captando cada cosa y espero sacar muchísimo de él. Lo que él dice lo estoy cogiendo el máximo", confesó.
Rafa Pueyo, por su parte, destacó que "por su estatura y su envergadura" la mayor producción de Dos Anjos está "cerca de la canasta, tanto en ataque como en defensa". "En ataque es un buen jugador sin balón aprovechando las ventajas de compañeros de línea exterior. Finaliza con habilidad y contundencia cerca del aro. Y en defensa es difícil de superar en el un contra uno por su capacidad de intimidación. Tiene una gran proyección y por eso le hemos firmado dos temporadas", dijo el dirigente. En la ACB ha habido un buen puñado de pívots brasileños que han dejado huella: Faverani, Paulao Prestes, Splitter, Nogueira, Hettsheimeir, Lima, Varejao...