Nurkic, clave tras el fallecimiento de su abuela: "No quería jugar"
El pívot bosnio reconoció tras el partido no encontrarse en condiciones anímicas de disputar el play-in. Pese a ello, firmó 21 puntos y 22 rebotes, decisivos para el triunfo de los de Oregon.
Los Portland Trail Blazers sellaron este sábado su billete a la primera ronda de los playoffs. Los de Oregon tuvieron que hacer frente al innovador play-in diseñado por la NBA para dar mayor acicate competitivo a los 8 partidos que cada equipo debía de disputar en la burbuja. Los de Terry Stotts acabaron la fase regular en octava posición del Oeste, aventajando en medio partido a los Grizzlies, los cuales aterrizaron en Orlando con 3 partidos y medio de renta sobre los de Stotts.
Sin embargo, los 2 triunfos en 8 partidos de los de Tennessee, sumados a los 6 en 8 de los de Oregon, propiciaron un intercambio de papeles clasificatorios. Los Blazers llegarían al play-in con la posiblidad de clasificarse ganando el primer partido. Dicho y hecho. Los de Stotts vencieron por 126-122 y sellaron su pase a la primera ronda de los playoffs. En ella, esperan los Lakers que han acabado como líderes de la Conferencia Oeste, pese a dejar ciertas dudas en su juego desarrollado en la burbuja.
Antes de viajar a Orlando, numerosos jugadores anunciaron su renuncia a desplazarse a la burbuja. Lesiones, cuestiones familiares, la difícil situación social que atravesaba Estados Unidos en aquellas fechas o el miedo a ser contagiados fueron algunas de las razones que sostenían los ausentes. Jusuf Nurkic, pívot de los Blazers, se encontraba en una coyuntura similar pero pese a ello, sí decidió estar con sus compañeros. La abuela del jugador de Tuzla había dado positivo por coronavirus, se encontraba en coma y su estado de salud era más que delicado.
Unas horas antes de disputar el primer partido del play-in del Oeste ante los Grizzlies, el jugador bosnio anunciaba en redes sociales el fallecimiento de su abuela. El jugador se despedía a través de la red social Instagram, en la que subía una fotografía junto a su abuela acompañada del mensaje: "Todos somos de Alá y a él volvemos".
Tras el duelo, el bosnio reconoció que no quiso jugar el partido y que le invadieron las dudas sobre si viajar o no a la burbuja. Finalmente, lo hizo, convencido de que su abuela estaría deseando verle jugar: "Yo no quería jugar desde el principio. Ella me hizo jugar, supongo. Me dejé llevar en mis decisiones. El quedarme aquí, el estar con el equipo, ella ha sido una motivación para ello. Estoy muy orgulloso de la victoria y de la clasificación a los playoffs, para eso habíamos venido", reconoció.
El jugador de Tuzla mostró su enorme frustración por la situación de la pandemia y la falta de conciencia social que denota en algunos ciudadanos: "La razón por la que estamos aquí es la pandemia. La gente ha dado por sentado demasiado pronto lo que está sucediendo en el mundo. Los últimos 2 días han sido los peores de mi vida. Mi abuela tenía COVID y estaba ingresada en coma. La gente no se da cuenta de la realidad", aseguró.
La resurreción deportiva de Nurkic en la burbuja ha sido sideral. Una lesión en la rodilla en marzo de 2019 le había alejado de las canchas y tuvo que esperar hasta el mes de julio, coronavirus mediante, para volver a sentirse jugador de baloncesto. Lejos de notar la falta de ritmo, Nurkic ha tenido un peso capital en el devenir de los de Terry Stotts. Con un promedio de más de 31 minutos de juego en cancha, el bosnio se ha convertido en el tercer jugador con mejor promedio de puntos y asistencias en los Blazers, así como en el segundo jugador más reboteador en el equipo de Terry Stotts.
Sus 22 puntos, 21 rebotes y 6 asistencias fueron decisivos en el triunfo de los Blazers ante los Grizzlies, que supuso el pase a los playoffs. El bosnio ya se marchó al descanso con un doble-doble, después de haber anotado 15 puntos y haber recogido 17 rebotes. Su labor en la pintura a nivel ofensivo y su importancia en el sistema defensivo de los de Portland se presentan decisivos en el futuro de los Blazers en la burbuja.