Alerta roja en Houston Rockets: Russell Westbrook tiene una lesión en el cuádriceps de la pierna derecha y no se sabe si podrá jugar en el arranque de los playoffs, donde además los texanos tendrán un duelo tremendo contra Oklahoma City Thunder. En lo deportivo (cuarto contra quinto del Oeste) pero también en lo emocional. Westbrook se medirá (si la lesión se lo permite) al equipo en el que desarrolló toda su carrera NBA hasta que fue traspasado a los Rockets, que a su vez enviaron a Chris Paul a los Thunder. En OKC, Paul ha jugado una extraordinaria temporada y dirige a un equipo con el que nadie contaba en el primer nivel tras las salidas de Westbrook y Paul George pero que parece perfectamente legitimado para, como mínimo, dar un buen susto a los Rockets. Y si encima no está Westbrook…

La situación ha sido extraña. Westbrook, que se unió tarde al equipo tras dar positivo por COVID-19, tuvo molestias en la pierna derecha por primera vez en la derrota ante los Blazers, el 4 de agosto. Después de perderse dos partidos por precaución, jugó contra los Spurs (en un día en el que descansó James Harden) con aparente normalidad. Pero a la mañana siguiente, ayer miércoles, se levantó con dolor, otra vez en la pierna derecha. Así que se le hicieron pruebas y estas arrojaron ese problema en el cuádriceps del que Mike D’Antoni no tenía mucha información ayer: “Esperemos que esté para el arranque de los playoffs, pero no sabemos ahora mismo. Reevaluaremos la situación en un par de días y a ver cómo está la próxima semana. No sé nada al 100%. En el partido contra los Rockets estuvo bien, después se encontraba bien pero se levantó otra vez con dolor después de dormir. Tenemos que ver cómo responde al tratamiento”.

Westbrook ha jugado cuatro partidos en Orlando y ha promediado 24,3 puntos, 6,3 rebotes y 7,8 asistencias. Los Rockets, que cierran la Regular Season en un duelo intrascendente con los Sixers, también tienen parado a Danuel House por molestias en un talón. Y contar los Pacers, PJ Tucker dejó el partido por un golpe en una mano y Eric Gordon regresó tras su lesión con evidentes síntomas de que necesita coger ritmo de juego. Un goteo de problemas que pueden ser muy peligrosos contra un rival como los Thunder, que llegan en plena forma y sin nada que perder… y liderados por un Chris Paul con ansia de venganza. “Sabemos que es vital para lo que queremos lograr aquí”, dijo James Harden sobre Russell Westbrook, cuya lesión preocupa en Houston a cuatro días del inicio de los playoffs. No parece grave, pero puede hacer que se pierda algún partido o que no pueda jugar al 100%. Y eso pondría las cosas muy cuesta arriba para los de Mike D’Antoni.