Cook y Bourousis sentencian otro triunfo del Granca en la prórroga
El griego arrasó: 25 puntos y 7 rebotes. Dos técnicas finales a McFadden y Peñarroya, fatales para San Pablo Burgos. El escolta pudo sentenciar al final de los 40 minutos.
Precioso partido de baloncesto el que le acaba de ganar el Herbalife Gran Canaria al San Pablo Burgos. Tuvo de todo, y todo bueno. Hasta una prórroga en la que el acierto desde el tiro libre de Bourousis y Cook, de nuevo estelares, sentenciaron la segunda victoria del conjunto insular, que se mete con todo en la pelea por pasar a la siguiente fase.
Tardaron en llegar las primeras canastas, pero cuando lo hicieron apareció al aluvión. Salvó inauguró el marcador tras sacarla un 2+1 a un despistado Okoye, pero Cook, imperial en la primera victoria insular, seguía. Así, su quinto punto, un triple que se unió a otro de Burjanadze, puso rápida al Gran Canaria con un tanteo de 8-3 a su favor. Costello se unió a la fiesta desde idéntica distancia, 11-5, pero San Pablo Burgos se recuperó rápidamente con un 0-8 de parcial sellado por un triple de Rivero: 11-13.
Se agarraba entonces el Herbalife a Bourousis, con cuatro puntos seguidos para el 15-15, guarismos aderezados con un triple de Lecomte que le dio de nuevo la delantera al Granca antes de que Benite, desde idéntica distancia, se la diera al Burgos al final del primer cuarto: 21-24.
Costello continuaba en plan demoledor, devolviéndole un soberano tapón a Lima antes de Cook enchufara su segundo triple para el 28-27. Se jugaban entonces los mejores minutos del equipo de Fotis Katsikaris, que sin embargo no conseguía dejar al Burgos al margen. Tampoco cuando preciosa combinación entre Beirán, Cook y Costello acabó en un cómodo mate de este último (32-29). Un nuevo mate de Costello le dio al Herbalife la máxima hasta entonces, 36-31, pero Vega recortó distancias rápidamente desde el 6,75. Dos tiros libres de Bourousis, que dejaban al gigante griego con ocho puntos, cerraron la tan disputada primera parte: 40-34.
En cualquier caso, no lo fue menos la segunda. Reaccionaron, y de qué manera, los pupilos de Peñarroya, que recuperaron la ventaja en el marcador tras un triple del ex Gran Canaria Pablo Aguilar que, además de traer el 42-43 en el marcador, cerraba un parcial de 2-9 para los azules. Se recompusieron los locales por medio de Lecomte, cinco puntos consecutivos para el 50-49.
Sucedió, entonces, la secuencia extraña, quizás no tanto, del partido. En apenas 30 segundos, falta, falta antideportiva y técnica para Javi Vega, que tuvo que abandonar el duelo. Esto espoleó al Herbalife, con Costello cerrando un 8-0 de parcial, 58-56, antes de Lecomte cerrara el tercer parcial, 60-56, difuminando en parte el triple anterior de Benite, el mejor de los suyos.
El intermitente McFadden inauguró a lo grande el último cuarto: 2+1 y 60-59 en el electrónico. El partido se trababa, conscientes ambos de todo lo que había en juego, quizás enturbiado el duelo por el miedo de ambos a perder. Un triple de Rabaseda le dio aire a los insulares, 69-64, y entonces Bourousis entró en trance. Su perfecta defensa sobre Benite acabó con la posesión del Burgos agotada y después, con cinco puntos seguidos, triple y canasta de dos, le dio un +10 al Herbalife que bien pudo valer medio partido: 74-64.
Tampoco es que San Pablo Burgos se rinde fácilmente. Tampoco hoy, y menos con Benite entrando en trance. Antes lo había hecho su ‘gemelo’ Bassas, pero un triple suyo puso a los suyos a cuatro puntos, 74-70. El Gran Canaria, tocado y casi hundido, paralizado por el miedo, apenas se sostuvo con dos tiros libres de Cook hasta que Benite, con otro triple colosal que supuso su 26º punto, puso a los de Peñarroya por delante, 76-78, obligando por supuesto a Fotis Katsikaris a pedir tiempo muerto con 20 segundos por delante. Se la jugó Cook, que anotó una cómoda bandeja, demasiado a esas alturas del partido, para colocar el empate. Ahora, con apenas 9 segundos de tiempo, McFadden se la jugó desde la bombilla ante Harper, pero el aro se puso tozudo y tocaba jugar la prórroga.
Cinco tiros libres consecutivos de Bourousis, uno de ellos por la técnica pitada al cuentista McFadden, pusieron al Granca 83-80 antes de Harper, en su primera canasta del partido, ajustara cuentas con un lejanísimo triple contrarrestado por otro de Bassas que supuso un apretado 86-83. Después, otra técnica, ahora a Peñarroya por protestar, acabó con un carrusel de tiros libres que le puso el partido en bandeja al Gran Canaria: 89-83. No se rindió el San Pablo Burgos, aunque dos tiros desde el 4,60 de Cook terminaron por sentenciar la victoria de un Herbalife que se mete de lleno, y con todas las opciones, en la pelea por las semifinales tras igualar precisamente a su víctima de hoy.