ACB | FASE FINAL 2020 | BILBAO 64 - BASKONIA 87
El Baskonia celebra la vuelta estelar de Vildoza y Granger
Palizón en el estreno para opositar al título ante un Bilbao Basket que notó las ausencias y al que el confinamiento le ha cortado las alas de marzo.
La incógnita de una vuelta a la Liga después de tres meses entre confinado en casa y entrenando con mil cautelas se despeja con ‘fichajes’ como Vildoza y Granger, dos jugadores derribados por las lesiones durante la fase regular e incorporados al Baskonia por esa fase patentada en plena pandemia. Los dos bases son unos superclase y lideraron la paliza del Baskonia a un Bilbao Basket que está sin muchas herramientas para seguir ampliando la colección de cabezas de Euroligas colgadas en su salón. Esta vez se le vio entregado, algo nada habitual, como si no quisiera tomar el ejemplo de ese Joventut subiéndose a las barbas de todo un Barcelona. Sus piernas no aguantaron el tute en el segundo tiempo.
El Baskonia parecía fuera del carro de los favoritos al título pero este arranque explosivo le sube como con un muelle. Al Bilbao Basket no le llega ni el físico ni el baloncesto para estas guerras. “No salgáis del plan. Se hacen las cosas como yo digo. Os quieren sacar de la pista”, se desgañitaba Mumbrú en un tiempo muerto en el tercer cuarto. Sabía que Ivanovic había trazado unas líneas muy diferentes a las de Perasovic cuando ganaron el derbi en Miribilla este año. Bouteille está en Málaga. Sin Brown, Haws ni Kulboka y con Serron lesionado en el tobillo izquierdo por pisar sin querer a Dragic, aunque pudo volver a la escena, había muy poco que hacer. Los vitorianos olieron la sangre, maduraron el derbi y se dieron el gustazo. Eric fue mucho más exuberante que un apocado Lammers en la pintura y Shengelia pasó por encima de tres jugadores como un avión en el minuto 37 camino del aro. Los bilbaínos no tuvieron más transición que un mate de Sule durante los 20 minutos finales.
El partido tuvo cierta salsa en el primer tiempo. Un parcial de 10-0 puso al RETAbet por delante (33-27). Negaba el juego interior baskonista, pero regalaba armas por fuera. No llegaban las segundas ayudas y con Sule había mucho más control en campo propio. Vildoza y Granger se repartían dos lujos de cuatro de cuatro en triples. Dos canastas seguidas desde el arco de Rousselle mantenían con vida a los pupilos de Mumbrú (47-51), que intentaba protegerse de las faltas con defensas zonales. Un 3-29 hasta el 50-80 fue demoledor. El problema de tener el equipo hecho para el año próximo y de que los que no siguen lo sepan por anticipado trae a veces daños colaterales. Sergio Rodríguez es uno de los que se van. Y se esperaba un paso al frente ahora que se ha quedado solo en el puesto de ‘tres’ y que ni Kulboka puede echar ahí un cable. Estaba tristón. El meneo acabó en -23, con Miguel Ruiz estrenándose como anotador con la camiseta de los 'hombres de negro'. El chaval tiene descaro: cinco tiros en cinco minutos. Los favoritos han cumplido el pronóstico en esta primera jornada. Continuará...