Zagklis: "El desafío es adaptarse hasta que llegue la vacuna"
El secretario general de FIBA concede una entrevista a As en la que insiste en la prudencia como concepto básico: "Hay que pensarse dos veces lo de volver a jugar".
El griego Andreas Zagklis (1980), secretario general de la FIBA desde diciembre de 2018 y número uno ejecutivo del baloncesto mundial, atiende en exclusiva a As desde Ginebra por videollamada durante tres cuartos de hora. Se interesa por el modo de trabajo en nuestro medio de comunicación estos días y manda "un abrazo fuerte a toda la familia de As". Este fue el resultado de la conversación.
-¿Cómo vive FIBA esta pandemia desde un punto de vista humano y deportivo?
-A nivel humano, primero teníamos una obligación ante nuestros empleados. En todas las oficinas de FIBA, trabajamos desde casa. Desde Miami, a Múnich, pasando por Abidján, Beirut, Singapur, Pekín o el Gold Coast (Australia), todo el staff trabaja en casa. Esta misma mañana (por el miércoles) tuve una reunión ordinaria con nuestro Bureau de Oceanía y todos se conectaron desde casa. Y además de nuestro staff, tenemos que cuidar a nuestros miembros en la comunidad del baloncesto en general. La prioridad, por supuesto, ha sido proteger a los jugadores, cuidar su salud. Por eso la FIBA ha sido, si no la primera, una de las primeras federaciones que tomó medidas drásticas. Movimos el Preolímpico de Foshan (China) a Belgrado, y pudimos organizarlo de manera profesional y adecuado para nuestros jugadores en un plazo de nueve días. Era difícil, pero lo hicimos. Agradezco el esfuerzo de las federaciones de China, Serbia, y también a las de Inglaterra, España y Corea, que demostraron flexibilidad y profesionalidad. Después, a 12 de marzo decidimos la suspensión de todas las competiciones FIBA, que aún está vigente. Y después del anuncio de las nuevas fechas de los Juegos Olímpicos, logramos con el esfuerzo de todos en la familia FIBA, aprobar en nueve días un calendario adaptado para los próximos tres años. Hemos demostrado que podemos adaptarnos de una manera rápida a una situación tan difícil y extraordinaria. Además de lo estrictamente conectado a las competiciones, somos una Federación que regula la actividad del baloncesto en todo el mundo y ahí, directamente nosotros, o a través del Tribunal Arbitral del Baloncesto, hemos intentado enviar directrices sobre cómo hay que operar en este periodo difícil para los jugadores, jugadoras, clubes y federaciones.
-¿Han podido abrir algún vínculo directo de comunicación con la OMS para poder ir actuando sobre escenarios o reciben los informes ordinarios para actuar sobre escenarios?
-FIBA tiene una comisión médica, cuyo presidente, Peter Harcourt, de Australia, tiene comunicación frecuente con las organizaciones territoriales. Recibimos las directrices de la OMS y de los Gobiernos donde nuestros eventos tienen lugar. Para el tema de coronavirus, hemos creado una comisión ad hoc. Están nuestros presidente y vicepresidente respectivamente; el jefe médico de la NBA que es miembros de la comisión; y dos expertos. Uno de ellos ya lo teníamos en nuestro equipo en infecciones. El otro es experto en epidemiología y va a seguir asesorándonos en este periodo. Nuestra Fundación tiene un vínculo permanente con la OMS y, a nivel de preparación de actividades para la comunidad de baloncesto, va a seguir teniendo un vínculo directo. No sólo a nivel sanitario, también de acciones.
-Ustedes tienen una responsabilidad enorme a la hora de ir anunciando fechas. Se han empujado calendarios, pero hay cierta urgencia para que se juegue. Al menos lo parece en el fútbol. ¿Es recomendable, cuál es su postura?
-La postura de FIBA ha sido clara desde el primer día, cuando decidimos suspender nuestras competiciones internacionales. Se hizo en dos reuniones. La primera, en el Bureau Central del 27 de marzo; y luego, en el Comité Ejecutivo de 9 de abril. La prioridad es la salud de los jugadores, jugadoras, y de los otros participantes. Somos un deporte de contacto, un deporte de equipo, y un deporte que trae masas de espectadores, principalmente en salas cubiertas. Y, en el 3x3, puede ser en un centro comercial o en una plaza central turística de una ciudad. El presidente y yo ya declaramos que no enviaríamos a nuestros jugadores donde no enviaríamos a nuestros hijos. Y más allá del contenido simbólico, aquí hay que pensárselo dos veces de tomar una decisión de volver a jugar. Entendemos y respetamos el hecho de que nuestros clubes y nuestras ligas tengan que pensar en opciones alternativas, siempre dentro del marco de las directrices y ordenamientos públicos que están ahí para proteger la salud.
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-El Mundial de baloncesto fue uno de los últimos grandes eventos deportivos de China. En Wuhan se llegó a culpar de los Juegos militares, donde participaron 104 países con más de 9.000 atletas, como posible origen del virus. ¿Antes del Mundial de China hubo algún input sobre China? Y si no lo hubo, porque se detectó después, ¿había algún tipo de recomendación sanitaria para jugadores, federaciones, periodistas o gente que rodeaba el torneo?
- No hubo este tipo de información o recomendación.
-Hay una relación estrecha con China a nivel de patrocinadores. ¿Se puede ver afectada por la pandemia, se ha roto algún vínculo?
-No. Es una pandemia global. Para nosotros, la relación con nuestra federación y socios en China no ha cambiado. Lo único que puedo comentar es que, de nuestras oficinas, la primera que empezó a trabajar en casa es la de Pekín.
-¿Cree que FIBA ha sido audaz y pionera por decisiones como la del traslado de Foshan a Belgrado? UEFA apuró, por ejemplo, con los octavos de final de la Champions.
-Aquí hay que evaluar la reacción de tu propia comunidad, no hay que hacer comparaciones. La comunidad del baloncesto ha apreciado mucho la postura de la FIBA, tanto en febrero, cuando movimos el Preolímpico; y luego, por la rapidez con la que actuamos el 12 de marzo y el 9 de abril. Podemos estar contentos. Pero lo veo como un deber de nuestro mandato. Es verdad que el presidente del COI nos lo comentó el pasado lunes cuando habló con el presidente Niang y conmigo. Nos felicitó por tomar medidas para proteger a los participantes en competiciones de baloncesto a nivel internacional.
-En España, por motivos de organización, interesa el Eurobasket de 2021. ¿Cómo llegó al acuerdo con FEB y Federación Francesa? ¿Cómo espera que se reorganice todo?
-Decidir sobre un calendario es algo difícil de pedir. Sobre todo, cuando hay organizadores que han empezado su preparación. Y aquí, hemos analizado todos los parámetros, empezando por el impacto físico a las jugadoras. Hemos decidido jugar el Preolímpico y luego ir a Japón. Ha sido la solución preferida en lugar de crear otro periodo para prepararse y jugar. Que el Eurobasket venga antes que los Juegos no reduce el sentido y el valor del torneo. Y no es un accidente que otra competición continental, el Americup femenino, se haya colocado en junio y no en septiembre, en las mismas fechas que el Eurobasket. España y Francia han demostrado un gran nivel de colaboración y es una situación de lujo para el baloncesto europeo femenino que puedan organizar este Eurobasket dos países de ese nivel. Tengo que agradecer el esfuerzo que han demostrado los socios de esas dos federaciones.
-Cinco años sin Eurobasket masculino. ¿Es demasiado para FIBA?
-La situación para el Eurobasket masculino es distinta. Hemos hablado con los jugadores. El presidente de nuestra comisión de jugadores es Dirk Nowitzki y sabe qué significa jugar en invierno en las ligas y luego jugar cada verano. Tener unos Juegos y un Eurobasket el mismo año pondría a los jugadores en una situación difícil. Para África y para Asia, la situación es distinta. África no tiene tantas selecciones en juego en los Juegos; y en Asia tienen los Juegos Asiáticos en 2022, que para ellos es importante. Por eso hemos distribuido de esta manera. Jugar en América en 2022 se hizo para alinear de una manera máxima el periodo de cesión de los jugadores que juegan en Europa y América Latina. Somos un deporte global y poner los dos torneos en el mismo periodo ayuda a nuestros clubes y a nuestros jugadores, porque tienen un periodo más armonizado para preparar la temporada.
-¿Cuál es el nivel de comunicación con la NBA? Hay incertidumbre respecto a su calendario de 2020 y de 2021 y si puede tener incidencia respecto a los Juegos. ¿Hay algún input desde Estados Unidos?
-Pues, primero de todo, tenemos su participación institucional. Mark Tatum, comisionado adjunto de la NBA, es miembro del Bureau Central y del ejecutivo de al FIBA. Participa en reuniones y decisiones. La comunicación con la NBA, además, es frecuente. No sólo a nivel deportivo e institucional sino también médico. El Chief Medical Officer de NBA es miembro de la Comisión Médica de FIBA y la NBA está representada en el Bureau de FIBA en América. Ellos participan. Y, por supuesto, a nivel de la Liga africana, somos socios, y hay una relación frecuente, estrecha, cotidiana, diaria, entre el Bureau NBA África y el Bureau FIBA en África. La inauguración la Liga África se ha postergado para otoño.
-Le pregunto más en concreto por el baloncesto español. Jorge Garbajosa ha sido nombrado presidente del Comité de Competiciones de FIBA por el Central Board. ¿Tiene opciones de entrar en el Central Board de FIBA a nivel mundial? ¿Cómo valora su gestión?
-Con España, sabemos que tenemos un miembro líder tanto dentro como fuera de las canchas. Dentro de las canchas, la afición española no se puede quejar con los resultados de los dos últimos años, de las selecciones absolutas y de las juveniles. Creo que los resultados hablan por sí mismos. A nivel institucional, puedo destacar que la relación entre la FEB y la ACB, como la recibimos desde fuera, ha mejorado mucho, y eso es resultado de buena gestión Y a nivel internacional, puedo confiar y contar, no sólo con la participación de Jorge en competiciones, sino en su contribución como presidente en una comisión en la que, como vieron hace dos semanas, hay conversaciones extremadamente importantes para el futuro de este deporte. Y en el que Jorge lidera un grupo en el que están Estados Unidos, China, Australia, Japón, Alemania, Serbia, Francia... Estoy muy satisfecho con nuestra colaboración y su crecimiento como administrador del baloncesto internacional es una cuestión de tiempo. Aparte...
-Diga.
-La comunicación entre nosotros está facilitada por un alineamiento generacional que nos ayuda a pensar de una manera parecida.
-Aseguran los expertos que, después de esta pandemia, el mundo será distinto. ¿El baloncesto será distinto, cómo puede cambiar teniendo estas singularidades, siendo un deporte de contacto?
-Como deporte global, y deporte con penetración social que no tienen otros deportes, nuestro trabajo es asegurar que el baloncesto salga más fuerte de esta crisis social provocada por la pandemia. Somos un deporte que se puede adaptar a todas las circunstancias. Tenemos el formato 3x3, más flexible y más fácil para organizar. Nos dicen los expertos que el 3x3, a nivel nacional, será la primera actividad del baloncesto que vamos a ver para volver a jugar. Supone menos jugadores y personas involucradas en la organización del evento. En este periodo también le hemos dado mucha importancia a nuestra estrategia digital porque es importante que la gente siga en contacto con el baloncesto desde su casa. Y estoy muy contento por la manera en la que hemos adaptado nuestra comunicación; de una comunicación centralizada en los eventos, a una comunicación dirigida a la diversión y como expresión social. Y veo que a través de esta pandemia, vamos a entender mejor el impacto de los programas Basketball for Good que estamos haciendo a través de todo el mundo.
-¿Se puede imaginar un baloncesto con guantes, máscaras? Ser un deporte de contacto obliga a esta pregunta en el escenario post-pandemia.
-Creo que todo el deporte, no sólo el baloncesto, depende de los desarrollos científicos. El primer paso para volver a jugar o poder evaluar cuándo vamos a jugar y cómo es la aplicación de los tests. Y segundo, por supuesto, el descubrimiento y la aplicación de la vacuna. El desafío más grande es cómo vamos a adaptarnos durante el periodo entre hoy y la vacuna.
-Imagino que está al tanto de la decisión de la ACB. Es de suponer que FIBA pone primero el eslogan por delante: primero, la salud de los jugadores; luego, la dignidad de las competiciones.
-Sí, por supuesto. También, por supuesto, entendemos que una liga profesional como la ACB planifique alternativas para activarlas en el momento que haya las condiciones para hacerlo.
-Le pregunto por la Euroliga. En tiempos de pandemia, siempre se habla de buenos deseos y de la oportunidad de acercarse. Ya existía un problema con los calendarios antes del coronavirus. ¿Se puede avanzar sobre un calendario unificado o el plan de trabajo de Euroliga hace difícil el encaje?
-Creo que, ya antes de la pandemia, hemos visto que el calendario que aprobamos en los inicios de la última década y que empezamos a implementar en 2017, no es un calendario para hacer daño a clubes o ligas. Y creo que lo hemos demostrado también con nuestras decisiones en este periodo de tres años o tres años y medio. El año pasado jugamos sólo una Ventana, en lugar de dos. También decidimos reducir la preparación de las selecciones para Preolímpicos para dar tiempo a las ligas domésticas. Esta pandemia pone el calendario y los partidos de clasificación en otro contexto, no en el que había en 2017. La pandemia pone también este tema de cesión de los jugadores en otra perspectiva. El principio de FIBA sigue siendo que el deporte necesita la presencia regular de las selecciones. Pero nos sacrificamos. A nivel de torneos grandes, dijimos que intentaríamos dejar un verano grande sin gran torneo. Y lo hemos hecho. Creo que FIBA ha demostrado no sólo su credibilidad y su postura consecuente, sino su flexibilidad para encontrar soluciones.
-Puede que uno de los primeros desafíos lleguen en noviembre con las Ventanas. Jugar los 80 partidos en 80 países. ¿Tiene la esperanza de que se juegue sin problema?
-Expresarse con certeza hoy para competiciones que se celebrarán en noviembre no es prudente. Lo prudente es decir que si el calendario está programado, hay que prepararse. Hasta noviembre, habrá mucha más información a nivel de baloncesto. Cómo pueden o no volver a jugar nuestras Ligas domésticas este verano, cómo pueden jugarse nuestras competiciones internacionales como la Champions en septiembre, cómo empezarán las ligas. No hay que olvidar que en noviembre también tenemos partidos de clasificación para el Eurobasket femenino. No sólo quiero enfocar las fechas para los hombres, sino pensar también en las mujeres.
-¿Le haría ilusión que Pau Gasol jugase las Ventanas para coger ritmo para los Juegos de Tokio si no encuentra una franquicia en la NBA?
-La participación de un jugador de este nivel, historia y calidad, es siempre bienvenida para nosotros como Federación internacional, organizador del evento. Pero esto es una cuestión de él, de su recuperación que espero que vaya bien y del entrenador de la Selección. Y de los responsables de la gestión de lo que Jorge conoce como La Familia.
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¿Qué mensaje le mandaría a la familia del baloncesto en España, no sólo los profesionales sino a los que juegan en la calle, en canteras, en LEB? Se preguntan cuándo volverán a jugar a baloncesto.
-Pues que regresaremos pronto y más fuertes. Y que el virus del baloncesto es más fuerte que el coronavirus.