"Para mí, el coronavirus ha sido una guerra. Y la he ganado"
El ex jugador Alfonso Reyes se encuentra en su domicilio y casi totalmente recuperado del coronavirus 28 días después de haberse contagiado.
Alfonso Reyes ya tiene casi doblegado al "perro negro", el coronavirus con el que lleva 28 días batallando y que le llevó al hospital con una neumonía bilateral. Twitter ha sido su diariode campaña, donde ha relatado su vivencia en un tono épico y bélico.Tras ganar la batalla, pide que no se olvide a los caídos.
"Twitter me ha servido para evadirme, crearme mi universo para superar una grave enfermedad, de una forma un poco bélica porque para mí es una guerra, una batalla que afortunadamente he ganado. Por desgracia, muchos miles de personas no han podido ganarla, hay que recordarlos y tener el máximo respeto por ellos", reflexiona el ex jugador en una entrevista con EFE por videoconferencia.
Alfonso Reyes (Córdoba, 1971), exjugador del Estudiantes y Real Madrid de baloncesto, entre otros, internacional con España y actual presidentede la Asociación de Baloncestistas Españoles (ABP) ha repasado su experiencia contra la enfermedad y la repercusión de la pandemia en el deporte, que espera pueda reanudarse, siempre que esté "garantizada la salud de los jugadores", recalca.
Su estado actual. "Hoy muy bien. Sí, estoy en casa aislado, es el último día que he tomado medicación, creo que estoy más o menos listo, me queda un poquito de tos, creo que son los restos de la enfermedad y espero acabar con ella lo antes posible".
Cuándo se infectó. "El viernes 13 de marzo ya me subió la fiebre, había tenido tos antes, pero no le había dado importancia, pero ese viernes con la fiebre, detecté que algo no iba bien y ya pensé que era el coronavirus, como luego se confirmó".
Síntomas. "El primer día fue tos y fiebre, luego dolor de cabeza, y una resaca muy grande, la tos que me impedía dormir y descansar. Luego estuve destrozado. No he tenido nunca una gripe, que yo recuerde, pero creoque esto no es una gripe, por lo que me cuentan. Por desgracia, hasta que no te pasa no eres realmente consciente de lo que es, pero es mucho más fuerte. A mí me ha dejado hecho polvo, ahora estoy casi ya al 100% físicamente, pero te machaca".
El uso del Twitter. "Ha sido una válvula de escape, un sitio donde desahogarme y, si también he podido ayudar a muchos enfermos a ver cómo es la enfermedad antes de que pasen por mis pasos, pues bienvenido sea, pero me ha ayudadotambién a mí mucho".