La maldición de Toronto: NHL, MLB... ¿y ahora también la NBA?
Si la NBA se cancela sin campeón habría pasado lo mismo que en otras ligas profesionales justo después del primer título de la franquicia afincada en Toronto.
La NBA avanza hacia lo que parece una inevitable suspensión definitiva de la temporada 2019-20. Las grandes voces mediáticas (Adrian Wojnarowski, Shams Charania, Brian Windhorst...) han empezado ya a hablar claramente del pesimismo que hay en una Liga cada vez más preocupada por cómo parar el golpe que por cómo organizar un final de temporada siempre sometido a los tiempos del coronavirus. La opción de convertir una localización como Las Vegas en una sede/burbuja donde concentrar a los equipos y tratar de ofrecer un espectáculo adecuado para las televisiones, sin público y del que saldría el campeón 2019-20 empieza a parecer poco más que un sueño, un último intento desesperado que hasta los epidemiólogos se han apresurado ya a desaconsejar. Lo normal, ahora mismo, es que no haya más temporada 2019-20 en la NBA y que nadie se haga con el título que estaban defendiendo (de forma excelente, además), los Raptors de Toronto.
Lo lógico, por lo tanto, es que una temporada aplazada y con el título vacante sea la continuación a la campaña del primer título en la historia de la única franquicia canadiense en la NBA. Los Grizzlies nacieron en Vancouver, pero se fueron a Memphis en 2001, precisamente cuando llegó Pau Gasol. Esta posibilidad ha hecho que en Estados Unidos se hable, por lo curioso del dato, de la maldición de Toronto. Desde luego la secuencia es particular: en 1918 el equipo de Toronto (entonces Arenas) ganó la Stanley Cup y en 1919 este título no se pudo decidir por el brote de la llamada gripe española. En la MLB de béisbol, los Blue Jays de Toronto ganaron por primera vez las Series Mundiales en 1992 y 1993 y la Liga se quedó sin resolver un año después, en 1994. Y ahora está a punto de suceder lo mismo tras el primer título del equipo NBA, los Raptors.
La Stanley Cup, el título que elige al campeón del hockey sobre hielo, es (orgullosamente) la final más antigua del deporte profesional en Norteamérica. Se entregó por primera vez en 1893, y en 1919 no se pudo jugar por la pandemia de gripe de 1918, la gripe española. Se iban a enfrentar Seattle Metropolitans y Montreal Canadiens en la ciudad del estado de Washington. La gripe hizo estragos en el equipo canadiense, que perdió en este trance a uno de sus jugadores, Joe Hall. En el caso de la MLB, las Series Mundiales de 1994 se suspendieron por la huelga de los jugadores que había comenzado el 14 de septiembre. Era la primera vez que la Liga se iba a quedar sin campeón desde 1904. El lockout duró 232 días, hasta el 2 de abril de 1995. El más largo del deporte profesional estadounidense hasta que la NHL paró 310 días y se tuvo que cancelar la temporada 2004-05 al completo.
Ahora, la desgracia ha golpeado a la NBA, que se vio obligada a parar el 11 de marzo, a poco más de un mes de los playoffs 2020, el tramo del que tenía que haber salido un campeón entre 16 equipos, uno de ellos los Raptors que se aprestaban para defender su anillo, ya no como favorito (Bucks, Lakers, Clippers...) pero sí después de una temporada excelente en la que la marcha de Kawhi Leonard había tenido menos efecto del que esperaban muchos. Ahora, sin embargo, todo apunta a la cancelación definitiva y a que tocará leer mucho sobre esta maldición de Toronto, una curiosa particularidad en la historia del deporte norteamericano.