Unicaja Málaga, a pesar de sus bajas, ha logrado una valiosa victoria en la pista del Joventut Badalona (82-97) tomándose su pequeña venganza de la derrota del pasado miércoles en Eurocup en este escenario (101-86).

Los verdinegros solo ha logrado una victoria las últimas siete jornadas y se complica sus aspiraciones de playoff. También con bajas, la Penya se ha ido abajo en los cuatro últimos minutos con un parcial de 4-17 (de 78-80 a 82-97) y lo peor es que los nervios están a flor de piel, especialmente en Prepelic, a pesar de sus 18 puntos de hoy.

Unicaja fue haciendo su partido, no dejando escapar a los catalanes en el marcado. Darío Brizuela, jugando de base, ha realizado un partido extraordinario (20 puntos con 4 triples) apoyado por Adam Waczysnki (18). Y los tres recién llegados, especialmente, Gal Mekel, que ha debutado (8 puntos y 9 asistencias), Axel Bouteille (15 puntos) y Marko Simonovic (6 puntos y 5 rebotes) han ayudado.

Destacar los 11 puntos de Rubén Guerrero, una pesadilla en la zona badalonesa, que ha cedido 16 tantos en segundas opciones por solo dos de los de Luis Casimiro

Sin Jaime Fernández, Carlos Suárez, Josh Adams, Alberto Díaz y Alex Toupane, Luis Casimiro ha tenido que optar por los recién llegados Axel Bouteille, Marko Simonovic y Gal Mekel para intentar tener un buen nivel de juego.

Delante, Carles Durán tampoco tenía su plantilla en buenas condiciones con la baja hoy de Conor Morgan y con Alen Omic con problemas de espalda y que ha jugado mermado.

Y Luis Casimiro ya colocó a Axel Bouteille de titular e hizo debutar al israelí Mekel a los cinco minutos y el choque fue una constante montaña rusa con constantes rotaciones de banquillos y ventaja badalonesa (19-15, m.9) neutralizado con un 0-5 por medio de Mekel y Bouteille al final del cuarto inicial.

El buen trabajo de Rubén Guerrero en los tableros daba ventaja a los cajistas (25-31, m.14) y el técnico local Carles Durán pedía tiempo y devolvía a Prepelic y Stevic a pista y un triple de Harangody y canasta de Prepelic empataban la contienda (33-33, m.16).

Marko Simonivic despegaba de nuevo a Unicaja (36-41, m.18) aunque los triples de López Arostegui y Prepelic avanzaban de nuevo a los verdinegros (42-41, m.19). Los andaluces le daban al vuelta al descanso (45-46). Las segundas opciones en el tablero badalonés les pasada factura a los locales.

Una salida fulgurante de Unicaja con dos triples de Brizuela y canasta de Bouteille daba la máxima ventaja visitante hasta el momento (45-54, m.23) con un parcial de 0-8. Alen Omic volvía a pista por Stevic (51-60, m.25) y la defensa badalonesa empezaba a cerrarse bien.

Resultado de la buena defensa fue un nuevo acercamiento local (59-60, m.28) y tiempo de Luis Casimiro manteniendo a Brizuela como base que no impedía que Omic avanzara de nuevo a la Penya (61-60, m.28) tras un 10-0 de parcial.

Con 63-65 se llegaba al último cuarto y Mekel, Bouteille y Simonovic estaban juntos en pista de salida y, tras técnica a Prepelic que le llevaba al banquillo, Duran apostaba por Zagars y Dimitrijevic en el dúo de bases y los badaloneses se mantenían arriba (72-71, m.34).

La Penya entraba en bonus y el técnico local Carles Durán recibía una técnica. Omic mantenía a su equipo en la pelea, pero Adam Waczysnki y Gerun daban la vuelta al marcador (78-86, m.27). Cada punto se peleaba al limite y Wroten volvía a pista por el joven Zagars cuando Unicaja cerraba mejor su rebote defensivo.

Con 82-89 (m.39) Prepelic y Stevic volvían a pista, pero se fallaba en el tiro exterior y los nervios, traducidos en técnicas, pasaban factura y ampliaban la ventaja final visitante (82-97).