Venganza de Antetokounmpo en Toronto: "Lo tenía en la cabeza"
Los Raptors fallaron ante los Bucks, que siguen siendo una apisonadora. Ambos se había enfrentado en los Playoffs 2019 y Anteto lo recordaba.
A Giannis Antetokounmpo se le nubla la vista cuando piensa en los Raptors. En los últimos playoffs fueron los que, remontando incluso, les apearon del camino. El griego tuvo que ver, además, ganar el campeonato al equipo que se lo había impedido a él, el MVP de la Temporada. Pero al aterrizar este martes en Toronto se debió comprar unas lentes porque pudo ver en primera persona y de lujo a los suyos tomándose la victoria a pecho para redimir un poco ese mal gusto a mes de mayo: "Claramente lo tenía en la cabeza, recordaba el sentimiento de la última vez".
Y es que los Bucks siguen a tope, sin un resquicio que haga pensar en debilidad. Se enfrentaban a los campeones en su casa en el segundo partido de un back-to-back. Y ni así caen. 50 victorias por sólo 8 derrotas, camino de algo grande.
Tras dos minutos de fallos, Lopez metió un triple e Ibaka le respondió con otro. Sería el único del hispanocongoleño (1/10) y uno de los dos tiros en juego (2/15) que encestaría. Como lo fueron en esos últimos enfrentamientos, la aportación de los interiores era importante y Serge Ibaka estaba promediando 21 puntos y 8 rebotes en ausencia en Marc Gasol hasta los 5 tantos que aportó anoche. Clave. Kyle Lowry, en la misma errática línea, jugó 40 minutos y tuvo un 16% de acierto.
La pelea de Terence Davis y el acierto de Matt Thomas, que enloqueció al ScotiaBank Arena con tres triples en dos minutos, llevó a los Raps a rozar los diez de diferencia. Un pequeño espejismo junto al rebote-mate de Boucher desde el cielo y a un Anunoby que mostraba algunas vergüenzas de la defensa de Budenholzer. Ahí pusieron los líderes de la NBA su arsenal y empezaron a caer bombas sobre Toronto. Las jugadas en ataque que empezaban Middleton y Anteto acababan en el cesto y la subida de líneas en defensa dejó rotos a los Raptors. El 19-34 del tercer cuarto puso las cosas en su sitio y ya no las movió. Al sonar la bocina final, 97-108.