El fin de semana del All-Star es un punto de inflexión para las franquicias de la NBA. Es momento de hacer balance de la situación de cada equipo, y con ello llegan muchos cambios, como el de los Cleveland Cavaliers, que separa su camino con John Beilein.

Los New York Knicks están muy cerca de hacer lo mismo. El puesto de entrenador, que está en manos de Mike Miller, peligra. En la Meca de la NBA han puesto el ojo en el banquillo, y no precisamente en los jugadores. Quieren un nuevo entrenador; alguien con experiencia en la liga y que conozca el equipo.

Con ocho años como entrenador, y 20 como entrenador asistente -siendo siete de éstas en los Knicks-, Tom Thibodeau se ha posicionado como el candidato principal a ocupar el puesto. 

“Realmente quiere el trabajo de los Knicks", señalaba una fuente cercana a Thibodeau. Él tiene ganas de afrontar un proyecto como éste, y ha demostrado estar a la altura. En 598 encuentros como entrenador, ha salido vencedor en 352 de ellos, un 58,9% de victorias. Y además, ha disputado 56 partidos de playoffs, con 24 victorias y 32 derrotas.

Su relación con Leon Rose (Presidente de Operaciones) es muy positiva, y creen que eso puede ayudar a que el ex de Bulls y Wolves, aterrice en Nueva York. "Thibs sabe que puede trabajar con Rose y también sabe que podría traer a su gente", apuntaba la fuente de Thibodeau.

Los Knicks están en el puesto número 13 de la Conferencia Este, con 17 victorias y 38 derrotas en una temporada que prometía mucho más antes de la agencia libre y con la posibilidad de adquirir jugadores de mucha calidad -aunque finalmente firmaron a Bobby Portis, Julius Randle o Taj Gibson-.

Jay Wright, entrenador de la universidad de Villanova, era otra de las opciones, pero ya ha rechazado la oferta señalando que no cambiará de equipo por ninguno de la NBA.