Laso: “¿Un Palau más caliente todavía? No, más es difícil”

El Madrid ganó la Supercopa al Barça en septiembre y el duelo directo en la Euroliga, así que el de este domingo (18:30, #Vamos) será el tercer Clásico de la temporada, el primero en el Palau. Pese a la tensión en algunos duelos previos, Pablo Laso no espera un ambiente más caliente. “Más es difícil”, asegura el técnico. Llull y Reyes son bajas, aunque el pívot completó parte del entrenamiento. “Y Carroll ha vuelto bien, como siempre”, tras pasar parte de las fiestas navideñas en Estados Unidos.

El emparejamiento Mirotic-Randolph. “En los partidos Madrid-Barcelona no puedes hablar solo del juego interior, de una solo cosa, no se puede centrar todo en una defensa. Para ganar al Barcelona tienes que hacer un partido muy completo”.

Lo que no puede faltar. “Entender que es un partido muy exigente, que jugamos ante un gran equipo fuera de casa. Si no entendemos eso, no estaremos preparados para competir. Necesitamos una gran concentración durante todo el partido”.

Ninguna recomendación. “Espero mucho ambiente, pero no he pensado nada fuera de lo que no sea el partido. Como entrenador solo me preocupan los jugadores del Barcelona, que son de gran calidad”.

El tercer Clásico de la temporada. “El primero fue una final, el segundo uno de la fase regular de la Euroliga y este lo mismo, pero de la Liga. Cada partido es diferente y al final no deja de ser uno más de la liga regular, pese a que sea todo un Barcelona-Madrid”.

Llull y Reyes, bajas. “El único que no ha estado en el entrenamiento es Llull, que es baja segura. Reyes, también es baja, pero sí ha hecho parte del entrenamiento. Y Carroll ha venido bien (de EE UU), como siempre. Los otros 14 jugadores (entre ellos Garuba y Nakic) están disponibles”.

El juego al poste bajo y lo que ha dicho Carlisle. “Cada entrenador intenta sacar el máximo de los jugadores que tiene. Si Carlisle (entrenador de Dallas Mavericks) tuviese a Tim Duncan, seguro que le metería el balón de espaldas, pero es cierto lo que dice, hay una tendencia hacia un juego más exterior, pero no creo que el poste bajo vaya a desaparecer. Depende mucho del estilo de los jugadores que cada entrenador tenga para tratar de hacer el mejor baloncesto posible”.

Este año podría haber hasta 16 Clásicos. “Si los hubiese, por una parte sería bueno, querría decir que estamos al máximo nivel. Así dicho, 16 suena a muchísimo, pero cada partido siempre es diferente aunque el rival sea el mismo”.

Un diciembre especialmente bueno. “Cinco jugadores nuestros venían del Mundial, muy trillados, y según llegaron les esperaba la Supercopa. Luego fichamos a Mejri, que también disputó el Mundial. Tenemos unos gráficos de minutos y vamos ajustando las cosas, pero hay otras que nunca puedes controlar. Nuestro diciembre ha sido muy bueno (comparado con otros años, salvo la temporada de los récords, la 2013-14, en el que el equipo estuvo invicto hasta enero), pero decís que muy bueno por las victorias y por las derrotas, y yo me fijo más en el juego… No dejaría el titular de que la preparación del equipo ha cambiado este año por el Mundial, pero sí es algo normal que haya influido en el nivel físico de los jugadores (mejor en diciembre esta vez y peor en octubre)”.

¿Un Palau más caliente todavía? “No, más es difícil. El Palau es siempre un campo que aprieta mucho, en el que la gente está muy encima. No espero nada que no haya visto ya en el Palau”.

El triunfo en el OAKA, ¿llegan en el mejor momento? “En Atenas hicimos un gran partido, pero tampoco creo que estemos en el mejor momento. Tiramos 40 triples y podría decir que fueron pocos, que pudimos tirar más con un acierto normal. Dominar el rebote nos permitió controlar el ritmo. Debemos mejorar en muchas cosas, pero sí que entendimos el partido que nos esperaba”.