Los Lakers se quejan de cómo tratan los árbitros a LeBron
El alero no lanzó ni un tiro libre en la victoria angelina en Memphis. En sus 17 temporadas, nunca había visitado tan poco la línea de personal.
Los Angeles Lakers consiguieron en Memphis contra los Grizzlies su séptima victoria consecutiva y elevaron su balance a un 14-2 que les convierte en líderes en solitario de la NBA. El triunfo en Tennessee fue sufrido: a menos de cuatro minutos para el final (3:24), los locales dominaban por 105-100. El parcial de 4-9 de los visitantes en los últimos instantes permitió a los angelinos sacar su novena victoria en la carretera.
Para lograrlo, los Lakers tiraron de otra noche magistral de LeBron James. El alero alcanzó los 30 puntos con un 14 de 27 en el lanzamiento y sin acudir ni una sola vez a la línea de tiros libres. Fue la 14ª ocasiones en sus 17 temporadas y 1.214 partidos en la NBA que acaba un partido de esa manera. Una anomalía que no comienza a ser tan anomalía: el cuatro veces MVP de la Liga promedia solo 5,6 intentos desde la personal por encuentro. Es el nivel más bajo de su carrera. Su anterior mínimo lo tenía como rookie con 5,8. La pasada campaña firmó un 7,6.
Y en los Lakers ha sonado la voz de alarma. “Es frustrante. LeBron va hacia la canasta toda la noche. Intentó nueve triples, pero está en la pintura durante todo el partido… Cuando ataca la canasta y obtiene cero intentos desde la personal, es algo frustrante”, dijo Frank Vogel, su entrenador. “Si miras mi brazo, estos cuatro o cinco rasguños son de los últimos encuentros y no fueron falta. Es un tema personal que me ha sucedido más o menos durante toda mi carrera y, sobre todo, en los últimos años”, comentó el propio James. “Nos ocuparemos del asunto por los canales adecuados y hablaremos con la Liga sobre esto”, continuó el técnico.
Según Los Angeles Times, los Lakers planean discutir con la NBA sobre la manera en la que se está pitando a James, que suma 89 lanzamientos por faltas esta campaña, muy lejos de los 241 de Harden, los 179 de Antetokounmpo y los 142 de Doncic, el top tres del campeonato. Incluso Lou Williams (122) y Trae Young (109) han visitado más veces la línea que el propio Rey.
Un escenario que muchos achacan con un cambio de estilo de LeBron que no es tal. O no tan pronunciado como se piensa. En los últimos años se ha acercado más al triple que en los inicios de su carrera: en su año de rookie trataba de ejecutar solo 2,7 triples por los 5,6 de este curso (0,3 menos que la temporada anterior). Sin embargo, sus penetraciones y su fuerza en la zona siguen siendo su principal arma cada día.
Para muchos el problema es el propio LeBron. Su físico, su fuerza hace que muchos de los golpes que recibe no sean concebidos como faltas. Casi ni se inmuta cuando nota el contacto de su rival y en algunas ocasiones el que sale peor parado es el propio infractor. Algo similar le ocurría a Shaquille O’Neal, al que casi había que matar para frenarle. Dos potencias sobrenaturales aquejadas del mismo mal.