Parker bendice a Murray: “Los Spurs están en buenas manos”

El AT&T Center de San Antonio se vistió anoche de gala para una velada de nostalgia con la retirada de la camiseta de Tony Parker, uno de sus jugadores míticos, que se retiró al final de la pasada temporada, y que jugó durante más de 15 años en la franquicia tejana. El acto fue muy emotivo y reunió a los compañeros del homenajeado, entre ellos Tim Duncan y Manu Ginóbili. Parker, de 37 años, que actualmente es presidente del ASVEL Villeurbanne, aprovechó la situación para señalar a uno de los integrantes de los San Antonio Spurs, el base Dejounte Murray, como su sucesor. “Estoy muy orgulloso de él, los Spurs están en buenas manos”, declaró Parker al medio digital The Undefeated.

Murray, de 23 años, ha empezado la temporada con fuerza. El base ha promediado en las primeras jornadas de la temporada regular de la NBA 11,8 puntos, 7,9 rebotes, 5,3 asistencias y 1,6 robos por partido, con una efectividad de campo del 48%. Para los Spurs, que llevan cinco victorias y cinco derrotas desde el inicio de la liga, el jugador, originario del estado de Washington, está siendo fundamental, junto a otro de los principales jugadores del equipo, LaMarcus Aldridge. Su compromiso con los Spurs se renovó recientemente por cuatro temporadas y un valor total del contrato de 64 millones de dólares.

Gregg Popovich, el entrenador y dueño del equipo, confió en él por primera vez en enero de 2018, año y medio después de ser seleccionado en el puesto 29 del draft de la NBA en 2016. El joven Murray sustituyó entonces a Parker en el puesto de base del quinteto inicial, y progresivamente se fue haciendo imprescindible. Cuando Tony Parker se marchó de los Spurs para jugar su última temporada como profesional en los Charlotte Hornets, Dejounte Murray se quedó definitivamente con su puesto, aunque la rotura del ligamento cruzado de la rodilla que sufrió en octubre de 2018 le alejó de las pistas durante toda la pasada temporada.

Esta temporada pinta diferente, y Popovich confía mucho en él. “Lo que me gusta de él es que aprende las cosas muy rápido. Le puedes exigir como a Tony y eso le hace mejor. Cuando alguien es así, sabes que va a crecer”, declaró recientemente el técnico de los Spurs. Murray, por su parte, intenta que la presión no le afecte y no corte su trayectoria. Su futuro parece brillante, y Parker, estrella de unos Spurs que consiguieron cuatro anillos de la NBA, ya le ha señalado como su sucesor. Ahora, es su turno.