Una temporada de locos: 93 partidos en 265 días
Este martes se juega la primera de las siete jornadas dobles de la Euroliga. El curso pasado, seis jugadores de la Liga Endesa disputaron 80 encuentros.
Esta tarde arranca la primera jornada doble de la Euroliga: serán siete en total, dos más que en la última temporada. El cambio del formato en la competición europea en 2016 y la ampliación a 18 equipos este curso ha multiplicado el número de partidos: un jugador podría disputar esta campaña casi 20 encuentros más que hace una década, de 75 a 93, en una temporada exprés ya que, como mucho, durará 265 días (del 21 de septiembre, fecha en la que comenzó la Supercopa Endesa, al 12 de junio del próximo año, la fecha límite que puso la FIBA para que los jugadores lleguen al Preolímpico). Es decir, se podría disputar un partido cada menos de 72 horas.
La temporada pasada seis jugadores de la Liga Endesa alcanzaron los 80 encuentros. Kevin Pangos, que no se perdió ningún partido del Barcelona, fue el que más jugó (82), seguido por sus compañeros Pierre Oriola y Víctor Claver (ambos con 81). Con 80 acabaron el base azulgrana Thomas Heurtel y los madridistas Facundo Campazzo, Walter Tavares y Fabien Causeur, que se perdieron tres duelos del Real, aunque por descanso, no por lesión.
Pero, ¿cuántos partidos se jugaban antes? La Copa de Europa no alcanzó los 20 encuentros (incluida la fase previa) hasta la temporada 1987-88 y la cifra de partidos de la máxima competición continental no alcanzó la treintena hasta la 2012-13. La Copa estrenó su formato actual (los ocho mejores en un torneo con eliminatorias) en la edición de Murcia de 1996 y la Liga Endesa adoptó su modelo en 2009 (fase regular, cuartos al mejor de tres partidos y semifinales y final al mejor de cinco). Antes llegó a superar los 50 encuentros con partidos de octavos o cuartos de final también al mejor de cinco partidos.
En los 60, los jugadores disputaban en torno a 35-40 encuentros por temporada, una cifra que aumentó hasta los 50 una década después y superó los 70 a finales de los 80. A excepción del curso 1994-95 (80 partidos divididos en 51 de Liga, 6 de Copa y 23 de competición), nunca se habían alcanzado los 80 encuentros. Algo que ahora se ha convertido en la tónica habitual.