Piculín Ortiz: un 'Hall of Fame' metido ahora a pizzero
Leyenda del baloncesto en Puerto Rico, y en China estos días por su entrada en el Salón de la Fama de FIBA, dedica su tiempo a su restaurante, Vintage Pizza.
Su pasión por la cocina nació en Barcelona, donde un amigo regentaba tres restaurantes italianos mientras él jugaba para el Barça (1990-92). Durante muchos años, hablar de baloncesto en Puerto Rico fue hablar de José Piculín Ortiz (1963). Hoy es hablar del dueño del Vintage Pizza, un local abierto en La Parguera, paraíso caribeño en el que gasta su tiempo, recibe a amigos de toda la vida como Larry Ayuso o el actual seleccionador, Eddie Casiano, y en el que ha olvidado un controvertido episodio con la justicia.
Piculín Ortiz fue arrestado en 2011, cuando agentes federales encontraron 218 plantas de marihuana en una casa de su propiedad. Piculín admitió que le pertenecían, pidió perdón y fue condenado a seis meses de arresto y nueve de arresto domiciliario, además de 600 horas de servicio comunitario. Al no cumplir todas las horas, la jueza Consuelo Carmen Cerezo volvió a mandarlo a prisión a 2016. Un episodio controvertido que le generó críticos, pero también defensores que vieron en su condena otros intereses. De eso ya se ha levantado Piculín.
Piculín está estos días en China y, salvo sorpresa, acudirá este lunes en el España-Puerto Rico que se jugará en Guangzhou, donde la expedición de Puerto Rico le esperaba desde este domingo. El pasado día 30 de agosto, ingresó en el Hall of Fame con, entre otros, Alonzo Mourning y Fabricio Oberto. Es el segundo puertorriqueño que entra en el Salón de la Fama después de otro pívot histórico, Teo Cruz.
Después de estudiar en la universidad de Oregón (coincidió con Gary Payton), Piculín fue el primer puertorriqueño drafteado (número 15, Utah Jazz). Alcanzó fama en España en el CAI, donde su tiro a tablero se puso de moda. Después de jugar en los Jazz hasta 1990, fichó por el Madrid (sustituyó a Dennis Nutt mientras el entrenador era George Karl), pero duró poco y el Barça le convenció para hacer pareja con Audie Norris. Allí fue campeón de Copa, pero chocó como todo aquel Barça con la Jugoplastika en Europa.
Su carrera fue decayendo después de su paso por Andorra, Málaga y Grecia (allí un positivo y una sanción de dos años acabaron) con su trayectoria en Europa) pero se estiró hasta los Juegos de Atenas (después de un histórico partido en el que firmó un cuádruple doble en el que firmó la clasificación de su país) e incluso más. Se retiró con 43 años y, lo que es más importante, después de su controvertido episodio con la justicia, rehízo su vida y se redimió. Se enroló en FIBA América (aunque ahora la oficina se va de Puerto Rico y él se queda en su país), colaboró con escuelas de baloncesto y descubrió su vocación de cocinero. La especialidad del Vintage Pizza, por cierto, es la Picu Four Cheese.