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Desastre para los Pistons: Griffin no jugará en la primera ronda

Los problemas en la rodilla izquierda obligan a ser conservadora a la franquicia de Michigan, aplastada en el primer duelo ante los Bucks.

Desastre para los Pistons: Griffin no jugará en la primera ronda
Michael McLooneUSA TODAY Sports

Si los Pistons lo tenían casi imposible ante los Bucks en primera ronda (60 victorias contra 41 en Regular Season, 4-0 en duelos particulares), el casi ha podido desaparecer definitivamente con las noticias que llegan tras el primer partido de la serie, un aplastante 121-86 en el que los de Antetokounmpo ya ganaban por 20 al final del primer cuarto: Blake Griffin, que fue baja en este encuentro, tampoco jugará en el resto de la primera ronda. No es pecar de pesimismo pensar que el ala-pívot no jugará más esta temporada, ya que no hay forma de imaginar a los Pistons superando la eliminatoria. Ninguna sin su gran estrella, si es que había alguna a priori con ella.

Griffin no deja atrás los problemas en la rodilla izquierda que le impidieron terminar en buenas condiciones la Regular Season. Primer se perdió tres partidos y volvió el 5 de abril, pero el dolor reapareció y ya no le ha abandonado. Y ahora Yahoo Sports asegura que no hay daño estructural, que no se sabe si habrá paso por el quirófano en cuanto acabe la temporada para el equipo pero que al menos en primera ronda no jugará ya que en la franquicia no quieren correr riesgos con un jugador que tiene un contrato bestial hasta 2022 (cobrará en estas próximas tres temporadas más de 109 millones de dólares).

El ala-pívot que llegó procedente de los Clippers había evitado las lesiones en una Regular que cerró con 75 partidos jugados y su sexta nominación para el All Star. Con promedios de 24,5 puntos, 7,5 rebotes y 5,4 asistencias, ha estado al mejor nivel de su carrera y ha sido la principla razón por la que los Pistons han vuelto a los playoffs. Por desgracia, no parece que vaya a jugar en ellos salvo que se produzca una reacción de su equipo que sería absolutamente histórico y que es francamente imposible de imaginar tras el primer partido.