Se resolvió el Este: sonríen los Pistons, lloran los Hornets

Terminó la carrera por los playoffs del Este sin demasiada emoción, aunque se había llegado a la última jornada de Regular Season con un puesto en el aire (se lo llevó Detroit Pistons, se quedó fuera Charlotte Hornets) y los enfrentamientos por decidir. Pero los resultados de domingo y martes nos habían dejado sin duelo directo a muerte en el Nets-Heat, y la debilidad espantosa de los Knicks se llevó la poca salsa que pudiera tener la disputa del último billete a las eliminatorias: los Pistons fueron tan superiores que no hubo emoción en el Madison (89-115)... y tampoco en Charlotte, donde los Hornets necesitaban un favor de los neoyorquinos, que no es desde luego la mejor situación en la que verse en la vida. Por culpa de una irregularidad que parece congénita, la franquicia de Michael Jordan no culminó su apretón final de mal estudiante y se queda fuera, un fracaso que puede implicar, por encima de todo, que Kemba Walker haya jugado su último partido con un equipo con mucho en lo que pensar a partir de ahora.

Estos serán los playoffs del Este 2018-19: Bucks-Pistons y Celtics-Pacers por un lado del cuadro, Raptors-Magic y Sixers-Nets por el otro. Por primera vez en ocho años habrá un finalista de la NBA distinto a Heat y Cavaliers y no llegará LeBron a la lucha por el anillo desde el Este. Así que, al menos por eso, la pelea se presenta apasionante. Hay tres equipos que vuelven (Nets, Magic Pistons por Cavaliers, Heat y Wizards) y un top 5 que ya estaba decidido y en el que los Bucks parten con ventaja de campo en todas las series después de llegar a las 60 victorias y acabar con 16 más que la pasada temporada. Toronto (58-24) ha ganado un partido menos con Kawhi, los Sixers (51-31) también uno menos y los Celtics (49-33), que llegan todo el curso en un amago de desastre, seis menos (49-33), asunto con mala explicación. Los Pacers se han mantenido en el mismo récord (48-34) a pesar de que han jugado sin Victor Oladipo desde el 24 de enero. Mucho mérito.

NEW YORK KNICKS 89-DETROIT PISTONS 115

Pero todo dependía de los Knicks... y así era imposible que hubiera al menos un poco de emoción. Los Pistons ya ganaban por 16 en el primer cuarto, por 27 en el segundo, por 36 en el tercero y llegaron al +40 (69-109) a menos de cinco minutos del final del partido que les devuelve a playoffs, por segunda vez en una década y primera desde 2016. Finalmente merecido, aunque relegados al octavo puesto y a una lucha a priori muy desigual contra Milwaukee Bucks, veremos con qué Blake Griffin: el ala-pívot no pudo jugar por los problemas de rodilla que arrastra, un nubarrón serio de cara a esa primera ronda.

Reggie Jackson (14 puntos en el primer cuarto, 21 con 7 asistencias totales) y Andre Drummond (10+7 rebotes y 20+18) certificaron lo que fue finalmente fue un trámite mientras caían sobre el Madison triples de Ellington (12 puntos) y Kennard (27). Los Hornets supieron muy pronto que su partido ante los Magic no valdría para nada. Se habían visto, en definitiva, en manos de los Isaiah Hicks, John Jenkins, Henry Ellenson, Kadeem Allen... Los Knicks acaban en 17-65, igualan su peor temporada (en 2014-15), llevan desde 2013 sin llegar a 40 triunfos y han sumado 77 en las tres últimas campañas juntas. Ahora toca hablar de Zion Williamson, Kevin Durant y Kyrie Irving... puede ser el verano del gordo de la lotería. O más bien más les vale que lo sea, porque si no...

CHARLOTTE HORNETS 114-ORLANDO MAGIC 122

Así, seguramente, tenía que ser el último partido de la temporada para unos decepcionantes Hornets, que acaban en 39-43, finalmente a dos partidos de un octavo puesto muy barato: con el aroma melancólico de la certeza del triunfo de los Pistons, que les dejaba sin opciones, y de los gritos de 'MVP' a Kemba Walker, que puede haber jugado su último partido con la franquicia de Carolina después de ocho años, tres All Sy un curso de 25,4 puntos y casi 6 asistencias de media que no ha servido para nada. Otra vez.

Que Kemba acabara con 43 puntos y 5 asistencias y su equipo perdiera parece un resumen cruel de los últimos tiempos en la franquicia de Michael Jordan. Que Nico Batum ni atnotara y sumara solo 2 rebotes también dice mucho de cómo han sido las cosas en un equipo que acaba lleno de interrogantes, pendiente de la decisión de Kemba y en el que terminan 17 años seguidos en playoffs de Tony Parker. Enfrente, los Magic demotraron (incluso sin Vucevic) su mejor salud. Sencillamente: Terrence Ross anotó 35 puntos, Aaron Gordon 27 y DJ Augustin 18. Steve Clifford (ex de los Hornets, irónicamente) ha hecho un trabajo fantástico en su estreno en un equipo que además tiene mucho margen de mejora para el futuro (Bamba, Fultz...) y que no jugaba playoffs y acababa en positivo (42-40) desde 2012.

Hornets y Magic tenían un idéntico 31-38 después de 69 partidos. Desde ahí, 8-5 para los de Carolina y 11-2 para los de Florida, que sin hacer ruido han tenido una de las mejores defensas de la NBA en estas últimas semanas y que se preparan para buscar una sorpresa a priori imposible ante Toronto Raptors. A los que, por cierto, ganaron la única vez que se han enfrentado (primera ronda de 2008) en playoffs...