El Iberostar jugará la Final Four si vence al Hapoel por tres

El Iberostar Tenerife le ha cogido el pulso a la tercera competición europea, la que organiza la FIBA bajo el nombre de Basketball Champions League. En 2017 levantó el título, lo que le permitió disputar luego la Copa Intercontinental y ganarla en ausencia de los equipos de la Euroliga y de la Eurocup. Ahora está a una victoria por tres puntos o más de volver a la Final Four (20:30, Mírame TV y TVC).

En la ida, la semana pasada en Jerusalén, cayó por 75-73 tras una gran segunda parte. Pasó de perder por nueve antes del descanso (45-36) a ponerse ocho arriba (45-53) tras un parcial de 0-17. El Hapoel se recompuso y, con dos tiros libres de J’Covan Brown (máximo anotador con 20 tantos), puso el +2 final. Si vence por tres hoy en un Santiago Martín que ya ha colgado el cartel de no hay billetes, disputará una Final Four pendiente de sede (en 2017 fue en Tenerife).

El Hapoel es un hueso duro. Ha ganado la Copa de Israel y se presenta en la Isla con una racha abierta en la Champions de nueve victorias consecutivas, la mejor de la competición esta temporada. Una plantilla con recursos y muy física dirigida en el banquillo por el histórico jugador del Maccabi y del Panathinaikos Oded Kattash. Y que cuenta con Amar’e Stoudemire, un seis veces all star de la NBA que sigue dando guerra con 36 años (12,5 puntos de media). Sobresalen también el escolta ex-ACB James Feldeine (16,2); el hijo de David Blatt, Tamir Blatt, base de solo 21 años (10,6 y 7,1 asistencias); y el ala-pívot TaShawn Thomas, muy completo (12,1; 6,1 rebotes y 2,1 pases). Yogev Ohayon es duda, como Javier Beirán en los locales, una pieza fundamental en los de Vidorreta que no pudo jugar en la ida por una contusión en el gemelo de la pierna derecha.

El Iberostar es uno de los cinco clubes españoles que aún aspiran a un título continental esta temporada. En las otras eliminatorias de cuartos, el Amberes, el Bamberg y el Nanterre llegan con ventaja de la ida.