NBA | PISTONS 112 - RAPTORS 107
Un heroico Lowry (35+7+5) no es suficiente para ganar en Detroit
Ante la ausencia de Leonard el relevo en los Raptors lo cogió Kyle Lowry, e hizo todo lo posible por llevar a su equipo a ganar. No lo logró.
Los Raptors no son los mismos sin Kawhi Leonard. Han sabido sobrevivir sin él, sólo han perdido cinco de los diecisiete encuentros en los que él no ha estado, pero se nota que son los mismos. En Detroit llegó una de esas cinco y fue en la prórroga.
No fue por Kyle Lowry, que lo intentó de todas las maneras y estuvo francamente acertado, algo que no es tan normal en él de un tiempo a esta parte. Anotó 6 triples y consiguió un 11/24 en tiros, también con 7 rebotes y 5 asistencias, un partido completísimo y digno del segunda espada en el que se ha vuelto a convertir el base.
A excepción del inicio, hubo igualdad. Los triples fueron los protagonistas del inicio del encuentro, en el que los Pistons se fueron más allá de los diez (20-9, minuto 8). El segundo cuarto se abrió con tres casi seguidos de Luke Kennard, lo que hacía presagiar lo peor para los visitantes, pero de la mano de Siakam y su capacidad para abrir espacios y que los compañeros entraran bien por el centro los Raptors lograron equilibrar las fuerzas. Con otros dos lanzamientos exteriores, esta vez de Norman Powell, se producía el efecto contrario: diez arriba los canadienses (64-74, minuto 33).
Se fueron a cinco los Pistons a falta de dos minutos gracias al buen hacer de Blake Griffin (27 puntos) y a que Reggie Jackson (17 puntos) sacó por fin la garra. Ahí Lowry redujo con una de tres, una de dos y un tiro que provocó el palmeo de Anunoby que lo empataba todo, y le quedó tiempo (1,6 segundos) para sacar la escuadra y el cartabón y poner en las manos de Marc Gasol, desacertado en los tiros, el lanzamiento que les podría haber dado la victoria.
En la prórroga fue otro cantar. Los Pistons sólo permitieron una acción fácil del rival, un triple de Danny Green, y respondieron con su pareja interior y, de nuevo, con Jackson. Lowry erró la bandeja para empatar y los Raptors se fueron de vació del Little Caesars Arena.