La Copa del Rey nos trae un derbi como los de antes

"Ahora, ahora es la hora", le grita la Demencia a los suyos, a un Movistar Estudiantes que se coló en la Copa del Rey por la gatera, arrebatándole en la última jornada de la primera vuelta (y por el averaje) la plaza de anfitrión al Fuenlabrada cuando ambos peleaban por escapar del descenso. No ha pasado ni un mes, pero las cosas han variado bastante en el equipo del Ramiro, en su mejor momento del curso, el mejor en años quizá. Cuatro triunfos seguidos en Liga en el WiZink Center, el escenario de hoy, una racha que empezó el día de Reyes ante el Madrid y que continúa abierta... Primera victoria ante los blancos en más de cuatro años. Huele a derbi de los de antes, cuando había un resquicio para la sorpresa.

“El Estudiantes tiene mucha capacidad ofensiva —explica Laso—, con tres jugadores muy anotadores y de registros diferentes como Clavell, Brizuela y Gentile. Cook y Hakanson son muy buenos directores para el tipo de jugadores que poseen y la llegada de Whittington les ha dado solidez. También Arteaga. Es el mejor Estudiantes”.

Enfrente, un Madrid que viene de vencer al Baskonia y de dar la talla en pista del CSKA, que contará con 3.500 seguidores en la grada, pero que arrastra dudas. Tavares no es el de octubre y la presencia de Llull sigue en el aire. Ayer completó parte del entrenamiento y pinta que se vestirá de corto. Vuelve el derbi, y es de campeonato.