La nueva cúpula directiva de la ACB, que no lleva ni un año en el cargo, visitó ayer la redacción de As. Antonio Martín, presidente de la Asociación; José Miguel Calleja, director general; y Ricardo de Diego, su director de marca. "La Liga de baloncesto será lo que los aficionados quieran", decía Martín el pasado julio, recién elegido con los votos favorables de los 18 clubes. El mensaje y la energía se mantienen, aunque ahora con más matices: "Hay que acercarse a la gente y tenemos que conseguir la atención de los jóvenes y de las mujeres".

Alcanzar a más público y rejuvenecer el perfil del seguidor medio. "Los hábitos de consumo del deporte han variado y debemos llegar de otra manera a la gente si queremos ampliar nuestros aficionados", explica De Diego. "Los jóvenes hablan del salseo como algo fundamental, así entienden ellos el entretenimiento. Comparten vídeos e información, pero no se quedan una hora y media delante del televisor viendo un partido sin interactuar. No podemos pretender que los seguidores consuman el contenido como en los últimos 40 o 50 años. El lenguaje de los jóvenes y su motivación es diferente al del aficionado tradicional y, por eso, tenemos que ir nosotros a buscarlos, incluso vinculándonos con la música o con el humor, como ha pasado con Pantomima Full y ­Broncano, que es un gran embajador. Para la Liga, por poner dos ejemplos, equipos como el San Pablo Burgos, donde la ciudad vive el baloncesto, y el Baxi Manresa son importantes, ya que arrastran seguidores jóvenes. Y también, con la cantidad de licencias femeninas que existen, nos falta muchísima atención de las mujeres".

Los tres se felicitan por que la actual Liga Endesa sea una de las más emocionantes y competidas de los últimos años, aunque reconocen que eso no es por su gestión. "A veces hay que tener suerte, David Stern la tuvo en la NBA cuando irrumpieron a la vez Magic y Bird en los ochenta". Tanto Martín como Calleja coinciden en que hace falta que los aficionados conozcan más a los actores de la ACB, que son los jugadores: "Te identificas con los deportistas si sabes de su vida diaria. Queremos construir un relato con los personajes y eso no se logra con la imagen de marca, sino con los actores".

También recuerdan que los ingresos económicos de la Asociación son los mayores de siempre, casi 25 millones de euros, de los que cerca de la mitad se reparten entre los clubes, y que nunca hubo una permanencia de los patrocinadores tan elevada como la de ahora: "Tenemos una dinámica y unas características distintas a las del fútbol; sin embargo, el buque no se ha hundido. Es cierto que los grandes clubes gastan más dinero del que ingresan, pero otros muchos dan beneficios, como es el caso del Iberostar Tenerife".

Las relaciones de los clubes con el sindicato de jugadores (ABP) y con la Federación Española (FEB) no han sido idílicas en los últimos años, pero Martín asegura que ahora son "buenas y mucho más fluidas". Tanto él como Alfonso Reyes (ABP) y Jorge Garbajosa (FEB) fueron jugadores internacionales y hay sintonía. "Con la ABP queremos mejorar aún más el convenio colectivo recién firmado y con la FEB, aunque cada uno tiene sus intereses, trabajaremos en cosas conjuntas". Y ahí se pone sobre la mesa la falta de identificación con los jugadores y la escasez de españoles en la Liga. "Los que acaban su etapa de formación con 18 años necesitan jugar, pero no es un problema solo de la ACB, sino también de la LEB Oro y Plata. Necesitamos una reflexión conjunta. Las selecciones inferiores dan sus frutos porque las ocho mejores canteras son de equipos ACB".

Para cerrar la visita, una necesidad ("ensanchar la cancha un metro, una urgencia que tiene el baloncesto profesional") y una curiosidad ("la Copa no es una competición oficial para la Ley del Deporte"). Respecto a esto último, el anteproyecto de la nueva ley recoge que "las ligas profesionales solo podrán organizar una competición". Martín lo tiene claro, "si eso sale adelante, no habrá ningún problema con la Federación".