EUROLIGA

Quince años del récord de Tanoka Beard: 63 de valoración

El pívot logró el 22 de enero de 2004 con el Zalgiris 35 puntos, 19 rebotes y 11 faltas recibidas para 63 créditos. La marca sigue vigente. Aquel año jugó con Sabonis.

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Tanoka Beard

Este martes se han cumplido 15 años del récord de valoración individual de un jugador en la Euroliga, marca que estableció Tanoka Beard (Utah, 1971) con la camiseta del Zalgiris Kaunas ante el Fortitudo Bolonia. El pívot, ex del Madrid, Valencia y Joventut, logró 63 de valoración el 22 de enero de 2004.

En aquella temporada, la 2003-04, Beard coincidió en el Zalgiris con Arvydas Sabonis, que logró el MVP de la Euroliga con 39 años. El Zar lituano promedió 16,7 puntos, 10,7 rebotes y 26,3 de valoración. Sabonis faltó a dos partidos y uno de ellos fue la visita de los de Kaunas al Fortitudo, ausencia que aprovechó Tanoka Beard para dar el do de pecho. En Bolonia, el pívot estadounidense sumó 35 puntos (11/14 de dos y 13/13 desde la línea de personal), 19 rebotes, 2 robos, 2 tapones y 11 faltas recibidas para los citados 63 créditos de valoración, aunque el duelo se lo llevó el Fortitudo por 117-107 sin prórroga. Beard batía el anterior registro, en poder del base esloveno Jaka Lakovic, que con el Novo Mesto había hecho 55 de valoración ante el Real Madrid el 18 de octubre de 2001.

Así lo recuerda Paulius Jankunas

Paulius Jankunas, que lleva ya 309 partidos en la Euroliga, ya estaba por entonces en la competición. Jugó aquel encuentro, apenas era el décimo en la competición. La Euroliga ha hablado con el jugador lituano, que no olvida aquel encuentro: “Han pasado 15 años y todavía lo recuerdo. Desde el principio nos dimos cuenta de que podía ser la noche de Tanoka Beard. Empezó muy intento y mantuvo el ritmo. Logró unos números impresionantes, realmente asombrosos. No creo que fuera el plan inicial aquella noche, pero tenía el día y nuestros entrenadores realizaron ajustes para que tuviera más el balón en sus manos”.

Sabonis y un amargo final ante el Maccabi

A pesar del gran impacto de Sabonis, Tanoka Beard alcanzó unos promedios más que notables: 14,6 puntos y 7,6 rebotes para una valoración de 17,4. La temporada, eso sí, acabó de forma amarga. El Maccabi eliminó al Zalgiris in extremis y le privó de la Final Four por una serie de errores concatenados, uno de ellos de Beard. Ganaban los lituanos 91-94 y faltaba dos segundos, Giedrius Gustas erró dos tiros libres (llevaba 18 de 19 esa temporada). En el segundo fallo, Beard entró en la zona antes de tiempo, antes de que el balón tocara el aro, y el Maccabi pudo exprimir los dos segundos que restaban con un saque con el reloj parado. Gur Shelef encontró a Derrick Sharp para que este anotara un triple imposible. Prórroga y en el tiempo extra 107-99 para el Maccabi que avanzó a la Final Four y conquistó el título. El primero de sus dos éxitos seguidos.

Han pasado 15 años del récord de Tanoka, que sigue vigente. El que más se ha acercado a esos 63 créditos desde entonces ha sido Dejan Milojevic, con el Partizán (ahora entrenador del Mega serbio), que el 2 de diciembre de 2004 sumó 55 de valoración. En la última década, solo Bobby Brown (Siena) ha alcanzado los 50 créditos (4 de enero de 2013).

Entre los mejores promedios de la Euroliga

Tanoka Beard es todavía el tercer mejor reboteador por media de la historia de la EuroLiga (9,1 de promedio). Solo le superan Joseph Blair (10,1) y Mirsad Turkcan (10). También ocupa el octavo puesto en la valoración media con 18,5, clasificación que lidera Anthony Parker (21,4), estrella del Maccabi triunfador en 2004 y 2005. Beard terminó su carrera en la Euroliga con 1.107 puntos totales y 663 rebotes en 73 encuentros, todos con el Zalgiris.

Sobre todo echo de menos la competición y la camaradería con mis compañeros de equipo —asegura Tanoka—. Éramos un grupo muy cercano. Ahora me encanta ver al Zalgiris y a Brandon Davies porque veo muchas cosas de mí en su juego”.

El estadounidense ayuda en la actualidad a desarrollar jugadores jóvenes con los que trabaja la técnica individual y entrena a un equipo de secundaria de su ciudad. Y no descarta entrenar a un nivel más alto, incluso fuera de Estados Unidos. De momento, esos 63 de valoración ahí continúan, imbatibles.