Unicaja se paseó con el Fiat y le espera el ‘grupo de la muerte’

Unicaja se dio un plácido paseíto con el Fiat de Turín, el decepcionante equipo italiano entrenado por el venerable Larry Brown que no asustó ni cuando se puso con ventaja de diez puntos (35-45) a falta de dos minutos para el descanso. El Martín Carpena sigue siendo un bastión. Ya son once victorias seguidas. A los malagueños les espera un Grupo G demoledor con Valencia, Estrella Roja de Belgrado y Limoges francés. ‘Grupo de la muerte’.

Los italianos comenzaron con ventaja de seis puntos (12-18 min. 7), volteado con un veloz parcial de 8-0 (20-18). A base de triples (6/8) Unicaja cerró el primer parcial con 26-21. El segundo acto empezó con el tercer triple de Sasu Salin (y ya iban siete). De manera plácida, Unicaja abrió una brecha de diez puntos (31-21). Los malagueños, muy relajados, permiten acercarse al Fiat con un parcial de 0-13 (31-34 min. 14). Casimiro ni se molestaba en pedir tiempo muerto. Dallas Moore ya llevaba 15 puntos. Con 33-34 el técnico de Unicaja por fin se decide a detener el juego para dar algún consejillo. Los triples ya no entraban como al principio (7/16). Los de Turín se ponen 35-45. El parcial desde el 31-21 es 4-24 (min. 18). La flojera de los verdes empieza a ser desesperante. El petardo en cuestión lega a su intermedio con 41-47. 20 puntos del señor Dallas Moore.

Pero no había motivos para inquietarse. El comienzo del tercer cuarto agigantaba la felicidad de incombustible Larry Brown, el entrenador de los turineses que tiene nada menos que 78 años. Agua. Ese 41-50 fue amortiguado con un 8-0 de parcial centelleante (49-50). Unicaja mejoraba en actitud y los malagueños vuelven a ponerse por delante en el marcador. 57-52. Tres triples seguidos de Wiltjer (min. 24) para dar la vuelta a la tortilla. Sin hacer nada maravilloso Unicaja se pone 64-54. El parcial, 23-7 (min. 28). Se cierra el tercer acto con 67-57. Moore ha dejado de anotar. Parcial de 26-10. El resto, un balneario.

La recta final ofrece una insólita autocanasta de Carlos Suárez. Unicaja rebotea y corre (76-61 min.34) pero sin desgastarse en exceso. 15/37 en triples. El desenlace no tuvo más historia que el par de minutillos de rigor que Casimiro concedió a Okouo y 18 triples con el último de Waczynski que cerró el partido con 89-68. Unicaja cerró la primera fase en Eurocop acumulando su undécima consecutiva en casa. Ahora le espera en el Top-16 todo un grupo tremendo.