Los Thunder se vengan de unos Jazz que no levantan cabeza

Los Jazz han perdido sus últimos 15 partidos de Regular Season en pista de los Thunder. Pero esa no era la historia de este partido. El tema central, lo magro, era el regreso de los de Salt Lake City después del repaso que le dieron a este mismo rival en primera ronda de los últimos playoffs. Un golpe que parecía definitivo para la pareja Russell Westbrook-Paul George... y una invitación al debate sobre las condiciones del primero como líder de un equipo de aspiraciones máximas.

Pero los Thunder con Sam Presti siempre vuelven, siempre están ahí. No se desvanecen ni dejan de intentarlo. Y esta victoria que fue mucho más plácida de lo que indica el 122-113 final (99-75 al final del tercer cuarto) no solo sacó el demonio de los Jazz de la cabeza de los de OKC sino que fue una reivindicación más del equipo que lidera el Oeste después de haber empezado 0-4 (17-4 desde entonces: 17-8). Presti mantuvo a George, como mantuvo a Westbrook tras la fuga de Kevin Durant que pareció arrasarlo todo. Y George está jugando a un nivel excepcional, tanto que se llevó los gritos de 'MVP' que suelen ser para Westrbrook. Y acabó con 31 puntos en solo 10 tiros (8/10, 5/6 en triples) y 4 robos. Mucho más eficiente que Westbrook y otro de sus triples-dobles excesivos: 12+11+10 con un 4/18 en tiros y un 0/5 en triples.

Además, Schroder (23+4+6) está encajando de maravilla cuando fue, ahora cuesta recordarlo, un contrato que se quitaron los Hawks de encima en el asunto Carmelo. Y Nerlens Noel cubre bien los minutos de ausencia de un Steven Adams (22+7) que está a nivel all star y a nivel Defensor del Año. Las cosas van de maravilla en OKC y este partido, si acaso, demostró que son mejores que el año pasado... y que los Jazz son por ahora mucho peores.

Porque los Jazz (13-15, 0-3 ya en su División) se vuelven a agarrar a, como hace un año, un acelerón después de Año Nuevo. Pero veremos si está vez puede ser tan fuerte... y cómo de lejos llegan. Ahora están a 3 partidos de playoffs después de, sí, un calendario duro por viajes (noviembre) y rivales (diciembre), pero también un nivel pobrísimo para lo que se esperaba del equipo de Quin Snyder.

A nivel colectivo, mucho menos autómatico el ataque (esta vez 28 pérdidas y 8/29 en triples) y mucho menos asfixiante la defensa. Gobert es mucho menos influyente, Ricky Rubio es mucho menos director (10 puntos, 4 asistencias, 5/13 en tiros), Ingles ha bajado revoluciones y Donovan Mitchell sigue con sus dolores de sophomore: 19 puntos pero 6/15 en tiros, 6 pérdidas por ninguna asistencia y, como Gobert, problemas de faltas.

Tal y como está el Oeste, cada noche hay duelos directos y partidos de los que quizá se acuerden los perdedores cuando se repartan definitivamente las cartas de los playoffs. Los Jazz ya han perdido unos cuantos, y suman otra vez dos derrotas cuando parecían (cuatro triunfos de cinco) asomar por la sala de rehabilitación. El camino es todavía largo... pero cada vez está más cuesta arriba.