Los Mavericks van muy en serio: victoria ante el líder y sin Doncic

Jugar en Dallas empieza a convertirse en una tortura para cualquiera que pasa por allí. Con un récord de 9-2 sólo hay dos equipos a estas alturas que hayan perdido menos partidos como local: los Clippers y los Sixers. Ya han caído allí los Wolves, los Thunder, los Jazz, los Warriors, los Celtics, los Rockets y ahora los líderes del Oeste, unos Clippers que venían de ganar cuatro partidos seguidos, once de los últimos trece.

Lo hicieron sin Luka Doncic, que se perdió su primer partido desde que llegó a la NBA por unas molestias en la cadera derecha. Nada grave parece, pero suficiente para dar descanso a quien ya se ha convertido en uno de los líderes de este equipo. ¿Cómo encararon la baja del esloveno? Pues como lo hace un buen equipo, sobreponiéndose a los acontecimientos como si nada hubiera pasado. Jugaron igual de bien que en sus últimas victorias y eso habla de que los Mavs ahora mismo son un equipo, juegan como tal y no se les puede considerar una comparsa en la conferencia Oeste.

Quien les gane será porque se lo ha currado (mérito por ejemplo para los Lakers y su triunfo del pasado viernes). Y quien pierda no tendrá que rasgarse las vestiduras pensando que ha tirado una victoria a la basura. Perder ahora mismo contra estos Mavericks no es ninguna deshonra.

Y a falta de Doncic bueno es Harrison Barnes. El alero ya venía jugando a un nivel espectacular y ayer volvió a confirmar que está en un grandísimo momento. Verle ahora recuerda a aquel jugador que prometía tanto en los Warriors y que poco a poco parecía haberse quedado por el camino. No en nada pero sí en mucho menos de lo esperado. Lo esperado era lo que está haciendo ahora. Ya promedia 18,3 puntos y un 41,2% en triples, muy por encima de las medias de su carrera en ambas cosas. Anoche acabó con 30 puntos y 9 rebotes.

Otro que se dio un gustazo ante los Clippers fue DeAndre Jordan, que se veía las caras por primera vez ante sus ex. Su partido fue excelso (16 puntos y 23 rebotes) y hasta su entrenador se lo reconoció al final del mismo: "DeAndre trabaja más que nadie". Aunque si hubo un héroe final ese fue Dennis Smith Jr. Con dos arriba en el marcador y a falta de 12 segundos puso un tapón a Tobias Harris en una defensa uno contra uno de un mérito tremendo. Se quedó con el baló, le hicieron falta y anotó los dos tiros libres para sentenciar.

Harris no tuvo su mejor día y se quedó en 15 puntos (5/18 en tiros de campo, 1/5 en triples). Esta vez tirando del carro estuvieron el resto de pilares que tienen este año los Clippers: Harrell (23+10), Gallinari (21+6+3) y Williams (21+3+8). Aún tienen dos partidos más fuera de casa (Pelicans y Grizzlies) y mantienen el liderato, pero empatados con los Nuggets y con los Thunder y los Warriors pisándoles los talones.