NBA | RAPTORS 104 - PISTONS 106
Los Pistons asaltan Toronto en el último segundo de partido
Reggie Bullock dio el triunfo a los Pistons sobre la bocina en el regreso de Dwane Casey a Toronto. Los Raptors llevan dos derrotas seguidas en casa.
Es curioso cómo cambian las cosas en tres días. Hasta el lunes los Raptors sólo habían perdido un partido y jugar en Toronto era sinónimo de derrota para sus rivales. Hoy llevan tres derrotas totales, dos en casa y se enfrentan a su primera minicrisis de la temporada. Sin dramatizar, porque siguen siendo el mejor equipo de la liga junto a los Warriors, pero perder en casa ante los Pelicans y los Pistons, dos equipos que no llegaban en su mejor momento, puede crear algunas dudas. Y más teniendo en cuenta que mañana visitan Boston y una tercera derrota consecutiva sería difícil de explicar en una franquicia que está haciendo todo bien.
Aparte de perder, la forma en que lo hicieron seguramente haya hecho más daño. Porque dominaron la primera parte con bastante seriedad (65-53 al descanso) y llegaron a tener ventajas de casi 20 puntos a mitad del tercer cuarto. Pero a partir de ahí el partido cambió por completo. Primero poco a poco (23-24 para los Pistons en el tercer parcial) y al final como una avalancha que se les vino a los locales sin saber muy bien qué hacer para contrarrestarla.
El 16-29 del cuarto final habla a las claras de cómo acabó cada uno de los contendientes. Y eso que Kawhi Leonard volvió a hacer un partido de los suyos (26+9+4+3), Lowry aportó en todas las facetas (14+7+7), Siakam siguió en su buena línea (17+7) y Valanciunas jugó más de lo normal ante la ausencia de Ibaka y tampoco estuvo mal (14+6 en 26 minutos). Salvo Lowry (-3) ninguno de ellos, ni Green, el otro titular, tuvo un +/- negativo. Todos estos datos habrían servido a Toronto para ganar si el partido hubiese durado sólo 36 minutos.
Pero los partidos duran 48 y en esos últimos 12 lo que se impuso fue el buen hacer y, porqué no decirlo también, la fe de unos Pistons que no se rindieron nunca. Blake Griffin volvió a completar un partidazo: 30 puntos, 12 rebotes, 3 asistencias, 3 robos y 2 tapones. Stanley Johnson (12) y Langston Galloway (13) aportaron buenos minutos desde el banquillo. Pero fue Reggie Bullock el héroe. El escolta titular, que no había tenido un buen día (1/7 en triples), metió la canasta decisiva sobre la bocina con un fadeaway. Calderón, que sólo jugó 5 minutos, le dio la asistencia a Bullock.