Murray (48) acaba con los Celtics y los Nuggets no frenan: 9-1
El base canadiense jugó el partido de su vida, los Nuggets remontaron 18 puntos y están en su mejor inicio desde 1976. Los Celtics, 6-4.
Los Nuggets marchan a toda velocidad: 9-1, el único equipo que ha ganado a los Warriors y 6-0 en su pista, que ya es mucho más que la altitud de las Rocosas: uno de los feudos más difíciles de asaltar de toda la NBA (imposible hasta ahora, de hecho). Es el mejor inicio de la franquicia desde la temporada 1976-77 y es, sobre todo, la confirmación de que este proyecto, macerado a fuego lento, está explotando definitivamente. La temporada pasada, una serie de catastróficas derrotas en finales igualados, una lesión grave de Paul Millsap y una defensa muy cuestionable les dejaron fuera de playoffs. Ahora, los Nuggets parecen no solo un equipo que estará con toda seguridad en las eliminatorias, también un dolor de cabeza para cualquiera en ellas. Aunque sea mirar a un futuro todavía lejano. Pero conviene recordar también que este equipo se guarda ases bajo la manga: juega sin su alero titular, Will Barton, espera a Isaiah Thomas y esconde esa wildcard que es Michael Porter, un talento de número 1 de draft (fue 14), una espalda que no sabemos cuánto y cómo le permitirá jugar. Ni cuándo.
El caso es que, en otra noche brillante, los Nuggets se impusieron a los Celtics en un partidazo (115-107) que decidió no perder Jamal Murray. El base canadiense (todavía 21 años) acabó con 48 puntos, el tope de su carrera y la cima de un nugget desde los 50 de Carmelo Anthony en febrero de 2011. Anotó 14 en un primer cuarto en el que sostuvo como pudo a su equipo (19-34 final tras un peligrosísimo 16-34) y sumó otros 19 en el último, en el que eclipsó a Kyrie Irving (31+5+5 con un excelente 13/17) en la batalla de killers. No es poca cosa. Sus triples, y sus penetraciones cuando ya su nivel de confianza había despegado completamente, decidieron un partido que los Nuggets ganaron pese a los problemas de faltas de Jokic (8+10+8) y pese a que los Celtics impusieron su estilo de salida. Después, se difuminaron en un duelo de ataques a pesar de que enfrentaba a dos de las tres mejores defensas del inicio del curso (la otra, la de los Bucks).
Los Celtics están 6-4 y 3-3 fuera del Garden pero no es este un patinazo que les deba preocupar demasiado. Aunque han parecido peores que Raptors y Bucks en este arranque de curso, tienen a su favor la confianza en sus cimientos, la profundidad de su plantilla... y a Brad Stevens. Pero como dijo el técnico, no son por ahora tan buenos como se esperaba que fueran. Con problemas en ataque, un Hayward todavía en rodaje y un Tatum (15 puntos en 14 tiros) que amasa mucho más la bola que hace un año y eso le lleva a peores porcentajes. Pero los Celtics, que esta vez sufrieron la que tantas veces es su medicina (remontada, mejores decisiones en los últimos minutos...) y que estaban 46-1 en los dos últimos años en partidos en los que se ponían en +18, estarán finalmente ahí. No hay duda. Y también lo estarán, cada vez podemos estar más seguros, estos Nuggets que ya huelen a alternativa en el Oeste. Michael Malone se acordó después del partido de los muchos aficionados de los Nuggets que había en la grada ("espero que se lo hayan pasado bien") y kyrie Irving criticó que Murray buscara el punto 50 en los últimos ataques y con el partido sentenciado ("ha sido una gilipollez"). Resaca de un partidazo.