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Ben Simmons-Donovan Mitchell: ¿quién será el Rookie del Año?

El base australiano era el favorito hasta la explosión del escolta de los Jazz. Juanma Rubio y Sergio Andrés debaten sobre quién se lo llevará.

Ben Simmons y Donovan Mitchell aspiran a ganar el premio de Mejor Rookie de la 2017-18.

Pocas veces una generación rookie tiene tanto y tan bueno como la de 2017, un draft que apunta a histórico por cantidad y calidad de sus representantes. Y que está liderado por dos grandes aspirantes al premio de Novato del Año, ninguno, por cierto, del top-10 del draft: el australiano Ben Simmons fue 1 en 2016 pero no jugó en su primera temporada por una lesión en su pie derecho que se alargó más de la cuenta. Donovan Mitchell, por su parte, fue número 13 el pasado junio. Vista esta primera temporada, no cabe duda de que tendría que haber sido como mínimo top-5. Realmente como mínimo.

Simmons promedia 16 puntos, 7,9 rebotes y 8 asistencias. Y es exactamente el tipo de jugador que prometía ser: un playmaker de 2,08 que supone un mismatch imposible casi para cualquier backcourt rival y al que su nulo tiro exterior (la gran duda cuando salió de LSU) no está suponiendo impedimento alguno para gobernar los partidos en el baloncesto profesional. Mitchell está en 20,6 puntos y casi 4 rebotes y asistencias por noche, casi 23 puntos de promedio desde el All Star. En él, los Jazz han encontrado mucho más que un anotador: un jugador franquicia, alguien que ha hecho olvidar en tiempo récord a Gordon Hayward y uno de esos jugadores que apuntan a especiales y que convierten en oro todo lo que tocan. Los dos serían un merecidísimo Rookie del Año pero, ¿quién merece más el premio? Uno tiene que llevárselo, salvo que se entregue compartido (opción siempre poco probable) y ya que no vale la propuesta en Twitter de Bill Simmons: darle a Ben Simmons el de la temporada pasada (se lo llevó Malcolm Brogdon tras los parones por lesiones de Joel Embiid) y a Mitchell el de esta.

Juanma Rubio: EL FAVORITO ES BEN SIMMONS

Mitchell lo merece. Mitchell es especial. Con Mitchell los Jazz han encontrado la mayor joya que se puede hallar en un draft: alguien sobre quién edificar un proyecto. Pero el Novato del Año es Ben Simmons. Lleva 10 triples-dobles pero la sensación es que hace uno cada día. Oscar Robertson sumó 26 como novato, el único con más que él. Magic Johnson totalizó 13 antes de cumplir 22 años, el único en esa categoría con más que el base/escolta/alero/ala-pívot australiano.

Pero no se trata solo de números: resulta fascinante la forma en la que Simmons gobierna los partidos incluso cuando anota poco y desde luego sin ninguna amenaza exterior. En la temporada está en 0/10 en triples, lo que debería ser anatema en el baloncesto moderno. Pero no lo es para un jugador tan especial. Los Sixers van a volver a estar en positivo y van a volver a playoffs (el primer gran salto adelante del proceso) y están en una dinámica que les hace pensar en superar como mínimo la primera eliminatoria. Y su gran rostro es Joel Embiid, pero Simmons es (casi) igual de importante. Juntos convierten a los Sixers en un equipo distinto, que se sale de lo convencional y que apunta a aspirante durante años a nada que se les siga rodeando bien (y ya veremos qué pasa con Fultz…).

En sus últimos siete partidos, por ejemplo, Simmons suma cuatro triples-dobles que son mucho más que cifras redondas. Son el resultado lógico de controlar partidos con una madurez casi ilógica y una visión de juego que le convierte en un jugador absolutamente especial. Y, para mí, en el Mejor Novato de la temporada.

Sergio Andrés: EL FAVORITO ES DONOVAN MITCHELL

¿Merece Donovan Mitchell el premio al Mejor Novato de la temporada? Desde luego. Pero la pregunta no es esa. La pregunta es si lo merece más o menos que Ben Simmons. Y ahí ya...

La candidatura de Mitchell es legítima. El número 13 del draft se ha convertido de la noche a la mañana en el líder de Utah Jazz. Es la estrella, la chispa de un ataque que necesitaba urgentemente un jugador desequilibrante.

En las últimas 15 temporadas, desde la mágica camada de 2003 (LeBron, Melo, Wade, Bosh...), solo seis novatos han conseguido terminar sus primeras campañas promediando al menos 20 puntos: Carmelo, LeBron, Durant, Embiid, Griffin y Tyreke Evans. Mitchell va camino de ser el séptimo. Ha anotado más de 20 puntos 39 veces, a solo una de las 40 de LeBron, a dos de las 41 de Lillard (y Tyreke) y a cuatro de las 44 de Durant, por ejemplo. Y aún tiene ocho partidos por delante para subir posiciones en una lista que lideran Griffin (55) y Melo (49). Ha anotado más de 30 puntos siete veces, las mismas que Durant en su primer año y solo por detrás de Curry (8), Griffin (14), Melo (10) y LeBron (13). Y ha anotado dos veces más de 40 puntos, los mismos que Griffin y más que todos los demás novatos de los últimos 15 años.

Si los Jazz juegan playoffs será gracias a Mitchell. También a Gobert (por supuesto), a Ricky o a Joe Ingles. No quiero hacer de menos a nadie. Pero esta temporada hubiera sido imposible sin la improbable explosión del novato. Y eso vale un premio al Rookie del Año. Pero... ¿Vale más o menos que la temporada de Ben Simmons?