Los Celtics acabaron con los Thunder esta madrugada gracias a una increíble remontada. Un partido al que, como viene siendo habitual las últimas semanas, los de Brad Stevens se presentaron con una amplia lista de bajas. Dada la importancia del jugador, quizá la de mayor relevancia sea la de Kyrie Irving. Poco antes de recibir a OKC, supimos que el dolor que sufre en su maltrecha rodilla izquierda (la misma que le hizo perderse las Finales de 2015 a partir del segundo encuentro) no remite. De momento, el descanso no ha surtido efecto. Una situación preocupante que hace que el base vaya a recibir una segunda opinión médica a finales de esta misma semana. Tal y como ha indicado Stevens, es muy poco probable que pueda volver a jugar durante la gira de cuatro encuentros que los de Boston tienen ahora programada por el Oeste: Portland, Sacramento, Phoenix y Utah.

"Está fuera por las molestias en la rodilla, no porque hayamos decidido que descanse. Queremos que sienta que se encuentra al 110%. No es ningún tipo de dolor dolor nuevo", explicó el técnico ante los medios de comunicación. Un dolor tan prolongado en el tiempo que le podría obligar a pasar por el quirófano una vez concluya la temporada. Una opción que el jugador, por el momento, no se plantea ya que está convencido que con algo de paciencia y reposo podrá regresar a las canchas para ayudar al equipo de cara al tramo decisivo del curso. A dos días de cumplir los 26 años, Kyrie no ha disputado más de 72 partidos en sus, con esta, siete temporadas en la NBA. En la presente se ha vestido de corto en 60 de los 71 compromisos de los verdes. Ha estado ausente en las tres últimas citas. No juega desde la primera mitad de la derrota ante los Pacers el pasado 11 de marzo. 

Una enfermería repleta 

A tres semanas para la conclusión de la regular season, a la de Irving se unen las bajas para toda la temporada de Daniel Theis y muy probablemente Gordon Hayward (hay quien especular con un hipotético regreso si Boston logra avanzar en los playoffs). Marcus Smart, operado de una rotura en el dedo pulgar de la mano fue operado la pasada semana. El base-escolta espera volver en nuna plazo de 6-8 semanas, por lo que espera no haber dicho aún adiós al curso. Jaylen Brown, aún bajo el protcolo por conmociones tras su aparatosa caída en Minnesota, completa la muy concurrida enfermería verde.