La camiseta de los Jazz de Ricky bate récords: ¡450 dólares!
La City Edition desborda todas las expectativas de ventas: la mitad no se pudieron vender porque tenía el nombre de Gordon Hayward.
En el primer año de Nike a cargo de las equipaciones de la NBA no ha habido seguramente acierto mayor que las City Edition, la línea alternativa que ha estrenado cada franquicia con diseños inspirado en la historia del equipo y de la ciudad correspondiente. Las hay fantásticas por resultado y por significado: en este enlace se pueden consultar todas.
Seguramente la más mediática ha sido la de Miami Heat, con recuerdo a la legendaria serie Corrupción en Miami (Miami Vice). Y una de las más arriesgadas, la de Utah Jazz, un degradado de tonos cálidos que contaba desde su génesis con recibir críticas muy dispares. La idea era dejar atrás el relieve de las montañas al fondo del skyline de Salt Lake City, una imagen típica de la ciudad que quedó inmortalizada en otra camiseta inolvidable durante los años de Karl Malone y John Stockton. Esta vez el objetivo era ampliar la mirada a las zonas más áridas del estado de Utah y mostrar el cambio de tonos que provocaba la puesta de sol sobre esas zonas de rocas y desierto. ¿Impactante? Desde luego. Los Jazz estrenaron la equipación, y diseño de la pista a juego, el 30 de enero. Con bendición: 129-99 a los Warriors.
El equipo está en un excelente momento: 17 victorias en 19 partidos. Una defensa asfixiante, un ataque colectivo y estético, una súper estrella en ciernes (Donovan Mitchell) y pinta de pelear hasta la foto finish (y a pesar de las lesiones de Rudy Gobert en la primera mitad de la temporada) por no caerse de los playoffs. Mucho más de lo esperado cuando Gordon Hayward decidió irse a Boston Celtics. Y esa nueva equipación se ha convertido en una especie de símbolo de estos fantásticos Jazz. Y no hay quien se haga con ella, literalmente. De esa línea, solo quedan a la venta en al tienda online del equipo los calcetines, en tonos carbón. El resto, nada: ni sudaderas, ni gorras ni por supuesto camisetas.
Nike y los Jazz esperaban controversia, pero la acogida ha sido apabullantemente positiva. El 23 de enero, una semana antes de su puesta de largo, se pusieron a la venta 300 camisetas que se agotaron en 72 horas. No hay más: cuando el equipo las vistió por primera vez, era ya casi imposible encontrarlas. Y el modelo de partido, que normalmente vale unos 130 dólares, se ha disparado en la reventa: se han vendido unidades por 425 dólares en eBay y las pujas rondan ya los 450. Las gorras se venden por 55 dólares y las sudaderas por 205. Los Jazz esperan poner algunas camisetas más a la venta antes de que acabe la temporada.
Pero no serán muchas: Nike tiene la idea de lanzar una nueva City Edition cada temporada, así que no había hecho demasiadas para esta primera toma de contacto. Además, el encargo de los Jazz se hizo en febrero de 2017, casi un año antes de su puesta de largo, y por entonces no superó las 700 unidades que pasaron a fase de producción. Otro problema: la mitad se hicieron con el nombre de Gordon Hayward en la espalda, así que tuvieron que ser descartadas cuando esté cambio de aires en verano. Quedaban unas 300, que han resultado ser una insignificancia a pesar de que en el equipo no podían esperar algo así: no sabían qué respuestas tendría el arriesgado diseño y nunca habían vendido más de 300 camisetas de un modelo alternativo a la primera equipación durante una temporada. Ahora no esperan más de 50 nuevas unidades para poner cuanto antes a disposición de una afición ávida de lo que se está convirtiendo en pieza de coleccionista. Se trabaja con Nike para tener más, pero en Salt Lake City tendrán que esperar al menos hasta el verano.
Si hay que fiarse por las ventas de merchandising, los Jazz están en un excelente momento a pesar de la salida de Hayward: las ventas de todas sus equipaciones en total han subido un 70% con respecto a la pasada temporada, a pesar de que el equipo entonces llegó a 50 victorias y a segunda ronda de playoffs. Y un 50% más que cualquier año de los diez últimos.
Pero la gran estrella son las City Edition, como en Miami. Dos casos, Jazz y Heat, que hacen que Nike se esté planteando si mantener esos diseños en las equipaciones de próximas temporadas aunque se creen otros alternativos. Cuestión de éxito.