Johnson: próxima guerra entre Warriors, Celtics... ¿y Houston?
El veterano escolta será cortado por los Kings y, con 36 años, buscará un anillo de campeón. Casi todos los aspirantes necesitan a un jugador de sus características.
Joe Johnson tiene 36 años. Es uno de los jugadores que más dinero ha ganado solo en contratos con franquicias NBA (va por más de 210 millones de dólares ya) pero sigue sin saber lo que es ser campeón. Y la ocasión se puede presentar ahora, después de que antes del cierre de mercado Utah Jazz, donde él ya no quería jugar y el equipo no veía necesidad de cargar con su contrato de 10,5 millones, le enviara a Sacramento Kings en la sonada operación a tres bandas con los Cavaliers.
En cuanto se consumó la operación, empezó a ser un secreto a voces que el escolta sería cortado y, con el buyout consumado, buscaría buen acomodo para los playoffs. Los Kings, sin rumbo deportivo, no le necesitan y él no tiene tampoco ningún interés en formar un bloque de veteranísimos entrañables con Vince Carter y Zach Randolph. Su talento es incuestionable y su capacidad para inventarse un buen puñado de puntos, también. La cuestión es cuánto queda en el depósito. Este año ha bajado de 9,2 a 7,3 puntos de media y de un 41% a un 27 en tiro de tres (42% en tiros de campo totales). El que apueste por él lo hará sobre la idea de que estaba desmotivado y desubicado esta temporada en los Jazz, y que todavía puede replicar en playoffs sus excelentes prestaciones de la pasada temporada (casi 13 puntos y 4 rebotes de media con voz de mando en muchos tramos decisivos de los partidos).
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Y pretendientes nobles no van a faltar. Los Celtics no concretaron la llegada de Tyreke Evans ni después de que Lou Williams saliera del mercado. Los Warriors querían recomponer un banquillo que está saliendo rana y en el que nadie anota con fluidez y los Rockets no pierden ocasión de tantear todo aquello que pueda potenciar aún más su ya supervitaminado arsenal ofensivo. Los tres, con Celtics y Warriors como primeros favoritos, se lanzarán a por él (o a por alternativas como Belinelli, llegado el caso) en cuanto lleguen los buyouts que siguen al cierre del mercado.
En Boston, Joe Johnson cerraría el círculo. Los Celtics le dieron el número 10 en 2001 y jugó 48 partidos de verde antes de irse a explotar en Phoenix y hacerse rico en Atlanta. Pero si quiere ser campeón, seguramente la opción más fácil sea optar por unos Warriors en los que de repente hay un hueco perfecto para un jugador como él, alguien que replique lo que en día hacía Barbosa (su compañero en los Suns del Seven Seconds or Less) desde el banquillo de los de la Bahía. Con McCaw muy desenfocado, Nick Young muy despreocupado y Casspi en mal estado físico, el campeón aparece como una opción idónea para ambas partes. Veremos.