LeBron, enfadado por el caso Irving, no renovará por el máximo
Según Windhorst (ESPN), una de las fuentes más fiables cuando se habla de James, señala que podría seguir en los Cavs, pero no cinco años.
La crisis interminable de los Cleveland Cavaliers ha dejado al descubierto todas sus costuras: un equipo entrado en años que no se recondujo durante el mercado estival. Nada salió a derechas. El adiós prematuro de David Griffin el 20 de junio dejó sin piloto las operaciones de un aspirante al anillo durante casi un mes hasta la llegada de Koby Altman. El nuevo mánager general se encontró un cuerpo anciano y enfermo, al que no se encontró recambio de garantías en la agencia libre.
La solución fue multitud de parches que no mejoraron en nada lo presente en las últimas Finales perdidas frente a los Golden State Warriors: Kyle Korver renovó por tres años y 22 millones, Cedi Osman llegó con un contrato por la misma duración y 8,5. Se volvió a firmar a Richard Jefferson por el mínimo, al igual que a José Manuel Calderón, Jeff Green y Dwyane Wade, los nuevos. La suma total en salarios para esta temporada se acerca a los 140 millones. El tope salarial se fijó en 99. El resultado final es una cantidad de dinero absurda en sueldos para no moverse ni un ápice del punto de partido con impuestos de lujo incluidos. Mientras, la franquicia de San Francisco se hizo (si era posible) aún más fuerte.
Altman se encontró otro regalo más: el caso Kyrie Irving había estallado días antes de que cogiera las riendas y no había vuelta atrás. La filtración era el punto final a la relación entre el base y los Cavs. Los Celtics pescaron en río revuelto ante la oposición frontal de LeBron James, que prefería que Cleveland forzara a Irving a cumplir sus dos años más de contrato.