Los grandes le dicen a Lete que su Liga privada va en serio

El secretario de Estado para el Deporte, José Ramón Lete, se ha reunido este lunes de urgencia, como avanzó AS, con los cinco clubes que disputarán la próxima Euroliga: el Madrid, el Barcelona, el Baskonia, el Unicaja y el Valencia. Los cuatro primeros se levantaron el pasado 9 de mayo de una reunión de la ACB con la amenaza de crear su propia competición. Desde entonces, las citas entre ellos se han repetido, la última, la semana pasada en Barcelona. Ahora, además, el Valencia también está dispuesto a estudiar la viabilidad de una Liga privada, pero siempre con el conocimiento del Consejo Superior de Deportes. La prioridad sigue siendo llegar a un acuerdo en el marco de la ACB y solventar una crisis institucional que se alarga en el tiempo (incluso se ha hablado de la opción de que el Gobierno apruebe un real decreto, algo que parece complicado).

Los grandes le han repetido a Lete el motivo por el que se plantean crear una competición privada que los clubes más pequeños no se terminan de creer. “Es un órdago para que cedamos a sus intereses”, dicen. Los de la Euroliga se reafirman: quieren una Liga con menos equipos (de como máximo 16, no de 18 como la que arrancará en un mes) y menos partidos para dejar espacio al calendario europeo. Y quieren también que se eleve el presupuesto mínimo por equipo que este verano quedó fijado en dos millones de euros para garantizar un mayor nivel competitivo.

Los cinco grandes han encargado ya un estudio jurídico para analizar la viabilidad de una nueva competición (y evaluar los costes de una salida ante posibles reclamaciones) en el caso de que no se cierre la crisis de la ACB. De darse esta situación extrema, el Madrid, el Barça, el Baskonia y compañía creen que se les unirían al menos cuatro o cinco equipos, aseguran incluso que algunos de ellos ya han mostrado su predisposición a participar en el nuevo torneo, que tendría que buscar un nuevo formato. Incluso se plantearían disputar dos partidos en cancha de los equipos que no fueran de la Euroliga para que estos aumentaran sus ingresos por taquilla.

Reuniones con el resto de clubes y la FEB

Una idea en fase embrionaria, pero que ya está en la mesa del secretario de Estado, que intentará mediar de nuevo para devolver la paz a la ACB. En los próximos días tendrá conversaciones con el resto de clubes y también con la Federación. En julio casi logró el pacto, pero los grandes rechazaron pagar 500.000 euros anuales a la FEB para que solo hubiera un ascenso y un descenso en una Liga de 16 equipos. Una reducción inapelable para los grandes a la que siempre se ha opuesto el sindicato de jugadores. Un cisma muy difícil de cerrar y que ya ha provocado la dimisión de Francisco Roca como presidente de la ACB.