Los Warriors pagan 3,5 millones por el posible robo del draft

Los Warriors se presentaron al draft 2017 como uno de los cuatro equipos sin ronda alguna en su poder, pero no salieron de vacío de él. Después de la salida de Jimmy Butler a Minnesota, los campeones llegaron a un acuerdo económico con los Bulls para hacerse con el número 38. Un 'pick' que emplearon para hacerse con los derechos de Jordan Bell. Antes de detenernos a conocer quién es el rookie en cuestión, conviene recordar que que la máxima cantidad de dinero que una franquicia NBA puede gastar a lo largo de toda una temporada en las distintas negociaciones que realice para hacerse con los servicios de jugadores son 3,5 millones de dólares. Ni un dólar más ni uno menos, esa fue la cifra que entregaron a los Bulls para colarse en un draft al que no habían sido invitados pero del cual se fueron en el bando de los ganadores. Toda una demostración de fuerza. Poderío sobre el parqué y poderío en los despachos. Así las gastan estos Warriors.

Pero, ¿vale la pena dejarse semejante dineral en un desconocido? Sólo el paso del tiempo podrá dar respuesta a esta pregunta. Por el momento, tendremos que conformarnos con algunos análisis que califican ya a Bell como el 'robo del draft' de este año. Si se confirman estos vaticinios, Steve Kerr tendrá a sus órdenes otra pieza más para seguir extendiendo su dominio. 

¿Quién es Bell?

Jordan Bell nació en enero de 1995 en Los Ángeles (California) y de formar parte de la plantilla de los Warriors la próxima temporada ganará apenas una tercera parte de lo que su nuevo equipo pagó por draftearle. ¿Una frivolidad? Quién sabe, pero parece que en la Bahía de San Francisco saben lo que hacen. Con él como líder, los Oregon Ducks volvieron a disputar este curso una Final Four de la NCAA 78 años después. Hay quien dice que no cuenta con los centímetros suficientes (206) para ser considerado un pívot puro, pero pocos han intimidado como él durante su paso por la universidad. Es un taponador puro y un reboteador muy agresivo. Sirva de ejemplo los 8 tapones que contabilizó ante Kansas en el 'Elite 8' y los 4 a North Carolina (a la postre campeones de la NCAA) en la semifinal. Estas características junto una excelente movilidad lateral le convierten en un gran especialista defensivo. Un perfil muy apreciado en los Warriors.

Si ya le cuesta a todo un all star como Klay Thompson contar con tiros, imagínense a un rookie como Bell. Sin embargo, este no será problema alguno. Es más, en Oregon se han cansado de repetirle que tenía que mirar más el aro. En su año freshman apenas promedió 4 tiros por encuentro. Lo que no quiere decir que no sepa lanzar, la lesión de Boucher le obligó a asumir una mayor responsabilidad en ataque. Superó la prueba con éxito. Quien a comienzos de su adolescencia se convirtió en un auténtico quebradero de cabeza para su madre y profesores por su indisciplina (hacía novillos para no ir al colegio, los deberes se quedaban sin hacer un día sí y otro también...), se ha convertido en todo un portento ofensivo por el que los campeones han pagado toda una millonada. Al menos en el mundo NBA.