Brown reta a LeBron tras dirigirle en 2007 a sus primeras Finales

"Le he comentado al equipo que la buena noticia es que los jugadores estás realmente sanos. La mala es que los miembros del cuerpo técnico estamos cayendo como moscas". Así bromeaba Steve Kerr ante la prensa tras el entrenamiento de los Warriors este pasado lunes. El entrenador jefe de los de Oakland puso asistir a la sesión y atender a los periodistas, pero él mismo indicó que los casi crónicos problemas que padece en la espalda hacen muy difícil que pueda dirigir a su equipo en el primer partido de las Finales 2017 el jueves 1 de junio (3:00 de la madrugada del viernes 2, hora peninsular española). Su presencia en el resto de encuentros se valorará según su evolución.

Salvo recuperación milagrosa, el asistente Mike Brown ocupará su lugar tal y como ha venido haciendo desde el tercer partido de la primera ronda ante los Blazers. Un Brown que, por cierto, no acudió al entrenamiento del lunes al sufrir una intoxicación alimentaria por culpa de una ensalada en mal estado. Pese a ello, se espera que pueda reaparecer ya este mismo martes y el jueves asuma las riendas del equipo en el Oracle.

No será el primer encuentro que dirija en unas Finales este hombre nacido en Columbus (Ohio) hace 47 años. Fue él quien llevó a los Cavaliers, sus ahora rivales, en 2007 a la primera serie por el anillo de su historia. Cómo no, en aquel equipo dirigía a un tal LeBron James. Ambos pagaron su inexperiencia y poco profundidad de plantilla ante unos Spurs que les barrieron (4-0) con Tony Parker como MVP de la final.

El ciclo de la vida

Brown no fue el primer técnico de LeBron en la NBA, ese honor le corresponde a Paul Silas, pero a día de hoy continúa siendo quien más partidos le ha entrenado como profesional. Le tuteló desde el comienzo de la temporada 2005-06 hasta la primavera de 2010. Cinco temporadas cuyo pico fue la disputa de las Finales en 2007. Sin embargo, el renacer de los Celtics de Doc Rivers y los Magic del mejor Dwight Howard acabaron desgastando un proyecto que se desangró con la destitución de Brown en mayo de 2010 y cuya defunción se certificó con aquel célebre The Decision el 8 de julio de ese mismo año en el que el de Akron anunció que se llevaba sus encantos a Miami. Una década después, ambos volverán a verse las caras en el mismo escenario pero defendiendo intereses diferentes. "No tengo ningún tipo de control sobre esto. Resulta irónico que sucedan este tipo de cosas. Justo se lo comentaba a mis hijos. Es una de las cosas buenas que tiene la NBA. Como en El Rey león, es simplemente el ciclo de la vida haciendo su función", explica.

Segundo paso por Cleveland

Tres años más tarde de su despido y tras una aventura en los Lakers con aroma a fracaso de por medio, Mike Brown regresó a Cleveland (como en el caso de LeBron, el equipo de su estado natal) para corregir el, en palabras de Dan Gilbert (su propietario), "error" de su primera salida. El técnico pasó a asumir la responsabilidad de hacer renacer al equipo bajo el liderazgo de Kyrie Irving. Una temporada duró su reconciliación. Tras un 33-49 de balance, fue cesado al término del curso 2013-14. Un par de meses después, LeBron anunció su ya icónico "I'm coming home". El 'Rey' regresaba a casa. Tres años después, y cobrando aún el salario pendiente de su último paso por los Cavs, tratará de dejar a LeBron sin el anillo. Una de esas dulces venganzas que a veces planifica el ciclo de la vida.