Ibaka y el 'Big 4' de los Thunder: "Alguien tenía que salir"

En junio de 2012 los Thunder disputaron las primeras y únicas Finales desde que la franquicia se mudara en el 2008 a Oklahoma City vía Seattle, donde eran los SuperSonics. En aquella serie acabaron cediendo 4-1 ante los Heat (4-1). O lo que es lo mismo, LeBron James consiguió el primero de los tres anillos que hasta ahora ha conseguido en su carrera. Sin embargo, el futuro del equipo que por entonces dirigía Scott Brooks (hoy en los Wizards) no podía pintar mejor. Sam Presti había construido un equipo talentoso e insultantemente joven en torno a cuatro jugadores: Kevin Durant, Russell Westbrook, Serge Ibaka y James Harden. Un ‘Big Four’ que anotó el 78,6% de los puntos de los Thunder en dicha eliminatoria cuando ninguno de sus miembros había cumplido aún los 24.

“No esperaba que ocurriera tan rápido y tan pronto. Pero sabías que llegado un determinado momento, alguien tendría que salir. Esto es baloncesto, es un negocio”, decía Serge Ibaka esta misma semana en el último podcast lanzado por Adrian Wojnarowski. El ahora jugador de los Raptors se refería a la dinastía soñada por OKC, esa que nunca llegó a ser tal. Su principio del fin se produjo apenas unos meses más tarde. En agosto de 2012 el propio Ibaka firmó una extensión de contrato por 48 millones de dólares y cuatro años (un contrato que finaliza cuando concluya este próximo mes de junio). Por aquel entonces, el propio Harden rechazó una oferta algo mejor: 52 y 4. Un desplante que hizo que a Presti no le temblara el pulso con el sexto hombre del equipo. Justo antes del inicio del curso 2012-13 fue traspasado a los Rockets.

“De haberse quedado en Oklahoma, James (Harden) no sería el jugador que hoy en días es. Allí salía desde el banquillo y jugaba en el mismo equipo que Russell (Westbrook) y Kevin (Durant). Seguiría siendo un gran jugador, pero no lo que ahora es”, explica Ibaka. La realidad es que en estos momentos Harden es uno de los máximos favoritos a llevarse el MVP junto a, precisamente, Russell Westbrook. Por su parte, Durant espera recuperarse de su inoportuna lesión de rodilla para regresar cuanto antes a los Warriors, candidatos número uno al anillo.