Los Warriors remontan; Cousins, patada y puñetazos al banquillo
El triunfo mantienen viva la gran racha: ya van 124 partidos de temporada regular sin perder dos consecutivos. Warriors-Cavs Game 5 en directo
El primer partido NBA de la historia que se emite en directo en Facebook (solo en India: noche Bollywood). Los Golden State Warriors, que venían de sufrir una horrible derrota contra los Grizzlies en un partido que tuvieron completamente controlado, se rehicieron tras un mal comienzo para batir a los Kings en en nuevo Golden One Center de Sacramento. Stephen Curry, que parece que no está teniendo una gran temporada, volvió a alcanzar los 30 (y van 11 veces esta campaña) y Kevin Durant acabó con 28 puntos, siete rebotes y seis asistencias y cuatro tapones.
No fue fácil para los de la Bahía. De hecho, Steve Kerr se marcó un Gregg Popovich pidiendo un tiempo muerto con solo 18 segundos disputados (Cousins machacó en la primera posesión del partido: no llegó la ayuda). Los Kings, liderados por un buen Rudy Gay (23 puntos) construyeron una ventaja que llegó a los 16 puntos en el segundo cuarto, pero no fue suficiente ante la gran colección de puntos que contiene la plantilla de los Warriors.
Sobrevivieron gracias a los cortes de Klay Thompson (18), la brega de Pachulia y lo increíblemente bueno que es Draymond Green (9+7+10+2+2). Después, Curry empezó a sumar y el partido se igualó en un abrir y cerrar de ojos. El dos veces MVP anotó hasta cinco veces desde el triple y ya suma 144 en la temporada, a solo uno de los 145 de Eric Gordon, que sigue líder. Curry también dejó alguna bandeja imposible marca de la casa y, con la inestimable ayuda de Durant (chico para todo junto a Green), consiguió separación suficiente para aumentar la gran racha: los Warriors llevan 124 partidos sin perder dos seguidos en temporada regular.
Patada, puñetazos y otra técnica
Cousins, que tuvo problemas con la actividad de los defensores de los Warriors (todos mucho más pequeños que él, pero buenos defensores, incómodos), no se podía creer que le acabaran de pitar su tercera falta personal (en la lucha por un rebote ofensivo con Draymond Green: faltita...) y lo pagó con el banquillo: patadón y varios puñetazos a su propia silla antes de sentarse. Otra técnica para el zurrón.