El 'Chacho' (12+9) se mete en el bolsillo a Philadelphia: brillante
Con un Joel Embiid que tiene más de estrella que de rookie (20+7), los Sixers estuvieron cerca de batir a los Thunder de Westbrook (32+12+9).
No le dejaron decidir. Ni a él ni a Joel Embiid. Sergio Rodríguez fue titular en su primer encuentro con los Philadelphia 76ers y dejó bien clara su marca. Ninguno de los 20.487 aficionados que abarrotaron las gradas del Wells Fargo Center pudo volver a casa con una idea distinta: el 'Chacho' fue el mejor de los suyos; el balón debería pasar siempre por sus manos.
Noche de alegrías en Pensilvania. Por fin, deben pensar los fans de los Sixers, un equipo que ha ganado un total de 47 partidos en las últimas tres temporadas (199 derrotas en ese periodo), que no puede dejar de lado las lesiones (Ben Simmons) y que, aunque aún no sea capaz de remontar el vuelo, sí parece haber encontrado las alas con las que entrenar. Dos nombres: Sergio Rodríguez y Joel Embiid. El primero porque le da sentido al ataque del equipo (el único, claro) y el segundo porque ya es más estrella que novato. El ex de Kansas, que no anotó 20 puntos en ningún partido universitario y que lleva dos años sin jugar (malditas lesiones), se tiró hasta las zapatillas cada vez que pisa el parqué: no perdona un ataque. Juega limitado por una restricción de minutos que le acompañará, parece, toda la temporada. Pero su superioridad cuando está sobre la madera en insultante. Lo tiene todo para triunfar: descaro, clase y físico de gran estrella. En su debut NBA, 20 puntos (6/16) y siete rebotes en solo 22 minutos. Y dos tapones espectaculares. "MVP! MVP!", le cantaban en Philly (también corearon el ya mítico 'Trust The Process'). Larga vida al Rey Embiid.
El 'Chacho' dio un recital. Sobre todo en el tercer cuarto. Sus números, 12 puntos, cuatro rebotes y nueve pases de canasta, no hacen justicia a un partido en el que fue mucho más. Su dominio del pick&roll y la experiencia para hacer solo lo que necesita que le dan los años, motivos suficientes para que le den las llaves del ataque de los Sixers. Otro dato que habla maravillas de su primer partido: cero pérdidas en 32 minutos de juego. Como reza el titular, Sergio estuvo brillante.
Un animal solitario
La victoria voló rumbo a Oklahoma City, pero no sin sangre, sudor y lágrimas. Kanter es una fuerza desde el banco (17+12), Adams progresa adecuadamente (16+5, mucho poste esta campaña) y Oladipo mejorará, pero la realidad es que Westbrook está solo en la cima de una montaña de cifras que no dejarán de llegar: 32+12+9 para el todoterreno en el primer partido sin Kevin Durant. Faltan demasiados puntos en las alas en estos Thunder -Álex Abrines debutó en la NBA con un triple en 13 minutos de juego-. Mucho tiene que cambiar para que la temporada no se la haga eterna al base.