WARRIORS 104 - CAVALIERS 89 (1-0) | IGUODALA
"Algunos tienen que ser sucios para alimentar a sus familias"
El alero de los Warriors responde de esta manera sobre el golpe que le propinó Dellavedova. Kerr y su pizarra rota: "La destrucción suele rebajar el enfado".
Volvieron las Finales con la reedición de las de 2015. Como ya sucediera el año pasado, en el primer partido de este 2016 Matthew Dellavedova volvió a acaparar buena parte de los focos. El base suplente de los Cavaliers es uno de esos jugadores que ejemplifican a la perfección la etiqueta de incómodo. Y eso que en ocasiones se extralimita, qué se lo digan a un Andre Iguodala que sufrió una de sus caricias... Tras el encuentro, que acabó deparando el primer zarpazo para los Warriors (1-0), el alero de Golden State se refirió de esta manera sobre el base australiano: "Respeto mucho las triquiñuelas de esta Liga. Hay jugadores que tienen que ser algo sucios, jugar físico para poder ganarse la vida y alimentar a sus familias. Sólo puedo mostrar mi respeto por ello. En cuanto a mí, se trata de seguir mantieniendo la compostura".
Junto a Livingston, 'Iggy' fue una de las claves sobre las que sustentó el triunfo de Golden State. "Es uno de los jugadores más inteligentes que he conocido en ambos lados de la cancha. Entiende el juego, se anticipa a las jugadas, a los movimientos del rival...", le alaba Steve Kerr, su técnico. El propio Kerr protagonizó otra de las anécdotas de la noche al romper la pizarra en el tercer cuarto en plena escalada de Cleveland. "La destrucción tiende a reducir la ira. Así que opté por pagar mi enfado con la pizarra en vez de con un jugador. Es mejor de esta manera", comentó.
Por su parte, en las filas de los Cavaliers, LeBron James realizó un análisis tan sencillo como esclarecedor: "Cuando el banquillo te supera 45-10 y concedes 25 puntos tras 17 pérdidas, importa poco lo que hagas o dejes de hacer. Así es muy complicado ganar, sobre todo a domicilio. Da igual el trabajo realizado sobre Curry y Klay Thompson".