Bosh: "Sería especial volver a Toronto para jugar el All Star"

- ¿Le pone algún nombre a sus movimientos?

- La verdad es que no, pero es una buena idea. Definitivamente necesito ponerles nombre, aunque no tengo muchos. Son como mis niños, tengo que bautizarlos. Es una ideal fenomenal.

- ¿Qué opina sobre los próximos partidos que van a tener?

- Va a estar bien. Ahora estamos en Phoenix, preparándonos para todo. Todos los equipos llegan a un punto en el calendario en el que se les pone a prueba. Estamos aquí y estamos muy contentos. Ahora tenemos que empezar a trabajar de forma intensa e inmediata. Va a ser una prueba para el equipo y para ver dónde nos encontramos. 

- Cuando estuvo lesionado el pasado año, ¿pensó en dejar el baloncesto? ¿A qué se hubiera dedicado en caso de dejarlo?

- No, nunca pensé en dejar de jugar al baloncesto por la lesión. Una de las cosas que me enseñó es que el baloncesto es una parte muy importante de mi vida y me lo ha dado todo. Le debo mucho a este deporte y estoy viviendo el que siempre ha sido mi sueño. Si hubiera tenido que renunciar a seguir jugando, probablemente seguiría involucrado con este mundo. 

- ¿Alguna vez ha pensado en su retirada? 

- Cuando llega el momento de retirarse, no hay más. Lo he pensado un montón de veces. Tengo 31 años, cumplo 32 en marzo, y me estoy acercando a la fecha de caducidad de un jugador de baloncesto. Cuando eso pasa, es algo que nos pasa por la mente, y es algo que cada vez se vuelve más real. Cuando ves el nivel de los chicos jóvenes, entiendes que es difícil seguir siendo competitivo, y estoy pasando por eso ahora mismo. Estoy jugando bien ahora, pero pienso en ello todos los días. Soy realista, y mientras siga jugando así, seguiré en las canchas. Cuando esté acabado, lo dejaré. Tengo una esposa y unos hijos exigentes que quieren mi atención. Cuando deje el baloncesto, esa será mi principal dedicación.

- Cuando perdieron contra los Knicks usted dijo "todavía no estamos". ¿A qué se refería?

- Creo que sólo buscaba consistencia, día tras día. Tenemos que tenerla, defensiva y ofensivamente. Nuestra fortaleza mental tiene que estar por encima de todo. Con esas dos cosas, encontraremos el camino para ganar partidos. Tenemos que asegurarnos de que cuando las cosas se ponen difíciles, podemos con ello, y sabemos cómo responder. Debemos permanecer juntos como equipo, para atacar y para defender. Son las cosas que hacen los equipos que ganan. Nosotros tratamos de llegar al nivel en el que se lucha por el título. Tenemos que demostrar que somos serios al respecto. Ves a los Warriors, a los Spurs, a Cleveland...dicen que juegan para ganar el título y todo el mundo piensa que son candidatos. Nosotros decimos eso y la gente piensa "ok" o no se lo cree. Pero tenemos que trabajar duro para ello, es algo más que palabras. Espero que la gente preste atención a mis acciones y no sólo a lo que digo.

- ¿Cuál es el All Star que más recuerda? ¿Qué opina del de este año?

- Probablemente Dallas porque yo soy de allí. Estaba muy emocionado por jugarlo en el Cowboys Stadium con 100.000 personas allí. Fue increíble. Quería ser el MVP, pero por supuesto, Dawyne Wade tuvo una actuación estelar. Estoy entusiasmado con el de Toronto, será interesante que se celebre fuera del país. Es bueno para el deporte, para el país y para la ciudad. Fue como mi segunda casa. Ojalá pueda ir y volver en unas circunstancias diferentes. Sería muy especial.

- Empezó su carrera en Toronto. ¿Cómo de especial sería para usted jugar el All Star allí?

- Sería genial, nunca hubiera pensado que un All Star se celebrase allí. Ahora está pasando, la ciudad ha cambiado mucho, las infraestructuras, la organización...sería increíble ir. He jugado la mayor parte de mi carrera profesional en el equipo de allí. Este es mi sexto año en Miami y en Toronto jugué siete. 

- ¿Con qué frecuencia juegan Wade y usted a videojuegos en su sótano?

- No jugamos mucho a los videojuegos, pero él tiene una antigua máquina de Pacman. Hicimos una competición con varios amigos cercanos para ver quién hacía la puntuación más alta. Se nos fue de las manos, pero gané. Después de eso, se reseteó. Tengo que ganar en todo lo que hago.

- Le he visto anotar muchas veces sobre la bocina y es muy inspirador, ¿cómo lo hace?

- No lo sé, sólo juego al baloncesto. Se trata de estar en el lugar correcto en el momento correcto. A veces entra y la mayoría de las veces no, pero todo se trata de tener confianza.

- Antes de jugar al baloncesto, ¿pensó en dedicarse a otro deporte?

- Jugué al béisbol, pero nunca pensé en dedicarme a ello. Jugaba como pitcher, aunque se me daba mejor jugar como primera base. Nunca he tenido mucho brazo.

- ¿Puede hablarnos de su asociación con Wade y por qué cree usted que funcionan tan bien juntos?

- Hemos pasado por muchas batallas. Muchos partidos jugando juntos, muchas situaciones...además, también es mi vecino. Es mucho más que un compañero de equipo. Es un gran amigo. Creo que nuestra conexión se basa en muchos años de experiencias juntos, haciendo un buen trabajo, tratando de ganar títulos y apoyándonos el uno al otro para seguir siempre al máximo nivel. 

- ¿Cuál fue su momento favorito en la NBA antes de convertirse en jugador profesional?

- Fácil. El sexto partido de Jordan en Utah. Todo el mundo lo vio. Él me hizo saber lo que sé a día de hoy, lo difícil que es. Es muy complicado anotar la canasta ganadora en un partido de liga regular. Él lo hizo en una final. Es casi imposible. Fue un momento histórico. Todo el mundo recuerda dónde estaba cuando vio esa canasta. Todo el equipo, ese legendario último tiro...ese es mi momento favorito.