GUÍA NBA | OKLAHOMA CITY THUNDER
Oklahoma City Thunder: con Durant, Westbrook y sin lesiones, a por el anillo
Dos jugadores capaces de dominar partidos a su antojo. Los Thunder pueden ser una apisonadora, pero necesitan evitar lesiones de cara a los playoffs.
La hora de la verdad. No hay vuelta atrás. Esta temporada decidirá el futuro de Oklahoma City Thunder. Kevin Durant está de vuelta, la mejor de las noticias para cualquier aficionado al baloncesto, y tiene una temporada completa para intentar un nuevo asalto al anillo con los Thunder, antes de que llegue el mes de julio y La Decisión (el alero acaba contrato). Con la experiencia que les faltó en 2012 y, quizás y por fin, una de las plantillas más completas de la NBA, los truenos saben que 2015 puede y debe ser su año.
La gran renovación de Enes Kanter (70 millones por cuatro temporadas) proporciona los puntos en la pintura que, para bien o para mal, ya no ofrece Serge Ibaka. El turco y el español repartirán minutos con el gigante neozelandés Steven Adams y con el siempre eficaz Nick Collison. Por fuera, los de siempre. Y lo que pueda aportar un Cameron Payne (nº 15 del último draft) que suena como posible robo de la lotería y que se está recuperando de una fractura en el dedo anular de su mano derecha. En definitiva, un auténtico equipazo.
Tras quedarse fuera de los playoffs en 2015 en el duro Oeste, los de Billy Donovan (nuevo técnico) buscarán volver a brillar. Tienen todas las piezas necesarias, pero en su lado del cuadro se necesitan mucho más que unos cuantos nombres para encadenar victorias.
Russell Westbrook y Kevin Durant son, probablemente y de forma individual, dos de los seis mejores jugadores de la liga (LeBron, Davis, Curry y Harden), pero la pregunta es: ¿pueden olvidarse de los números para llevar a su franquicia a lo más alto juntos?
Todos querrán a Durant el próximo verano, algunos (como John Wall y los Wizards de su Washington natal) incluso lo avisan con tiempo ¿Qué han de conseguir los Thunder para que el ‘35’ no abandone el Estado de Oklahoma? Sólo él tiene la respuesta. O puede, y de hecho es lo más probable, que ni siquiera él lo sepa todavía.
La grada del Chesapeake Energy Arena rugirá y OKC, salvo catástrofe, luchará de tú a tú contra los demás monstruos que esperan su momento en el lado más duro del cuadro. Como mínimo, Warriors, Spurs, Clippers, Grizzlies, Pelicans y Rockets tendrán los puños preparados. Y no hay que descartar todavía sorpresas en Minneapolis, Utah, Dallas o Sacramento. La batalla será tan cerrada, un año más, en el Oeste, que no se puede dar casi nada por hecho. Sólo algunas cosas: una de ellas, que estos Thunder van en serio a por el anillo.
Juego exterior
Con Russell Westbrook y Kevin Durant poco más necesitan los Thunder. Hablamos de una de las mejores plantillas de la Liga, con dos de los seis mejores jugadores del campeonato en sus filas. Por fuera, Dion Waiters, DJ Agustin, Anthony Morrow, Kyle Singler, Andre Roberson y el rookie Cameron Payne serán los encargados de ayudar en todo lo que puedan a la pareja de superestrellas. Como en todo equipo grande, será importante que el elenco de secundarios anote los tiros abiertos, lo que hará que Westbrook y Durant confían en ellos, que las defensas sean incapaces de llegar a todas las ayudas y que crezca una química ganadora. En definitiva, que los de Oklahoma se conviertan sobre el papel en un equipo de 60 victorias.
Más allá de la importancia de los secundarios, se trata de un equipo en el que los egos de los dos grandes exteriores también tendrán mucho que decir en el desarrollo de la temporada. Westbrook y Durant nunca se han llevado mal, pero lo cierto es que después de lo que logró la campaña pasada, el base puede verse al nivel del alero (y no hay que culparle por ello). Lo que nos lleva a la pregunta del millón, sobre todo con un Durant que se encuentra ante su último año de contrato: ¿quién es y quién va a ser en el futuro el líder de estos Thunder? Eso sí, si ambos consiguen dejar de lado su orgullo y se centran en el baloncesto, habrá muy pocos equipos que puedan hacer frente a los de Donovan.
Juego interior
Con la millonaria renovación de Enes Kanter, los Thunder ganan centímetros, potencial y muchos puntos en la zona, pero caen enteros en una flexibilidad económica que podría ser la clave del futuro de la plantilla. Con lo que suma el jugador turco, un Serge Ibaka en forma (sobre todo para defender), la intimidación y la envergadura del australiano Steven Adams, la experiencia de Nick Collison y la fuerza de Mitch McGary, en Oklahoma cuentan a priori, también, con uno de los mejores juegos interiores de toda la NBA.
Quizás anden faltos de juego en el poste (ninguno de los cinco que tendrán minutos es precisamente un especialista de espaldas a canasta, aunque Kanter se salva), pero es que no lo necesitan. Con Durant y Westbrook acaparando toda la atención de las defensas rivales, los de dentro se limitan a poner bloqueos, continuar el pick and roll y perfeccionar el tiro de cuatro o cinco metros que tantas veces lanzan sin ninguna oposición durante la temporada. Duros atrás, con Ibaka y Adams liderando la carga, y hábiles en ataque para finalizar jugadas: un juego interior que se ajusta perfectamente a las necesidades del equipo. La clave, tanto por dentro como por fuera, van a ser las lesiones. Si los importantes consiguen mantenerse sanos y llegar en buenas condiciones a los playoffs, los Thunder tendrán tantas opciones de levantar el Larry O’Brien como el que más.
Claves
1. El estado físico y mental de Kevin Durant. El ‘35’ vuelve a las canchas, esperemos para quedarse. El curso pasado fue el ejemplo de que sin él los Thunder no tienen mucho que hacer. Y ahí es donde entra el factor mental. Su último año de contrato lleva tiempo rondando las cabezas de todos en OKC.
2. La relación entre las dos superestrellas. En Oklahoma la ecuación es clara: Durant no es lo mismo sin Westbrook y Westbrook no es lo mismo sin Durant. Ahora, tras las últimas exhibiciones del base, habrá muchos que piensen que están al mismo nivel ¿Quién será el verdadero líder?
3. Billy Donovan. Se marchó Scott Brooks (¡Por fin!, gritaron algunos) y con él sus siete años de relación con Westbrook y sus ocho con Durant. El ex de los Gators puede que tenga sobre sus hombros el futuro de la franquicia. Esta temporada no es desde luego una más en para este equipo.
Entrenador: Billy Donovan
Con Scott Brooks fuera del mapa, el banquillo de los Thunder tiene un nuevo dueño: Billy Donovan, un técnico con más de 20 años de experiencia en la liga universitaria (NCAA), pero que por primera vez en su carrera estará al mando de un equipo de la mejor Liga del mundo. Donovan ganó la NCAA con los Florida Gators en 2006 y 2007, año en el que llegó a firmar un contrato con Orlando Magic al que luego renunció. Ahora llega a Oklahoma para liderar a un equipo con urgencias. Su primera temporada no será de prueba: tiene que ganar, y ganar ya. Los Thunder, con el último año de contrato de Durant en la cabeza, intentarán un segundo asalto al título (perdieron las Finales en 2012 ante los Heat).
Estrella: Kevin Durant
El MVP de 2014 vuelve a los parqués para intentar un último asalto al título con su actual contrato. La agencia libre llegará y con ella el momento de decidir su futuro profesional. Pero, hasta entonces, codo con codo con Westbrook y a por el ansiado anillo.