El mejor Calderón (17p) no pudo salvar a los Knicks

La segunda derrota de los New York Knicks en la pretemporada, quinta victoria para los Boston Celtics (85-99), arrancó con un tiro fallado de Kristaps Porzingis (ocho puntos para aquel niño de las trenzas) que José Manuel Calderón convirtió en tres puntos tras capturar un rebote ofensivo. Empezaba bien la noche del extremeño, que luce titularidad en uno de los conjuntos más mediáticos de la NBA y que acabó el encuentro como máximo anotador con 17 tantos, además de aportar ocho rebotes y tres pases de canasta.

Pese a los esfuerzos de un Calderón que a los seis minutos ya había sumado ocho puntos, la primera parte perteneció a Marcus Smart. El base, titular en su segundo año en los Celtics, acumuló siete tantos y ocho asistencias en los primeros 24 minutos de juego. Conocido por su gran defensa, Smart destrozó a la contención neoyorquina, encontrando a sus compañeros liberados posesión tras posesión en una primera mitad en la que los locales llegaron a conseguir 19 puntos de ventaja.

Con un Carmelo Anthony muy desacertado (4-18 en los tiros, ocho tantos), los knickerbockers fueron todo el partido a remolque y fueron los invitados de lujo en la fiesta de Jared Sullinger. El ala-pívot, que salió desde el banco, fue el mejor del encuentro. En los 18 minutos que estuvo sobre el parqué, Sully anotó 16 puntos (6-10), capturó ocho rechaces y repartió seis asistencias: le dio tiempo a todo. El rookie Terry Rozier, que se fue hasta los 15 puntos en Madrid hace unas semanas, sigue dejando buenas sensaciones: ocho tantos, tres rebotes y dos pases de canasta.